La Sociedad de Fomento Fabril, SOFOFA, ha informado que las exportaciones industriales han caído un 23 por ciento en los primeros once meses del 2009, comparados con el mismo período del año precedente. Las cantidades se redujeron 7 por ciento y los precios un 23 por ciento. La caída continúa aunque más lentamente. En noviembre del 2009 las exportaciones industriales se redujeron todavía un 7 por ciento respecto del mismo mes del 2008.
Afectó a todos los principales productos de exportación industrial, como se puede apreciar en el primer cuadro adjunto, tomado del informe de SOFOFA. Los más afectados fueron el metanol (-65,3%), el salitre (-59,7%), los refinados de petróleo (-54,9%), las maderas aserradas (-43,3%), las manufacturas de cobre (-40,1%) y la celulosa (-26,2%), entre otros.
Los salmones, el principal rubro de exportación industrial, sufrieron un derrumbe de los volumenes físicos (-20%), debido al virus ISA. Sus precios repuntaron algo, lo cual aminoró la caída del valor, que alcanzó un 12 por ciento.
En cuanto a los destinos, con excepción de Asia, que cayó sólo un 6 por ciento sostenida por las importaciones de China, las caídas afectaron a todos los mercados, tanto desarrollados como emergentes. El NAFTA, determinado por los EE.UU., se redujo un 18,9 por ciento y la UE un 31,7 por ciento.
Sin embargo, el MERCOSUR y la Comunidad Andina se redujeron en 20,8 y 26,7 por ciento. El resto del mundo cayó un 45,8 por ciento. Ello se muestra en el cuadro siguiente, tomado asimismo del informe de SOFOFA.
Es decir, se trata de una caída general.
Las exportaciones industriales representaron un 35 por ciento del total de las exportaciones del período, detrás de la minería que aportó el 57 por ciento y seguida por la agricultura con un 7 por ciento.
Los gráficos que siguen fueron preparados por CENDA en base a datos del Banco Central obtenidos de www.bcentral.cl el 15 de enero del 2010. Muestran la evolución de las exportaciones de bienes, diferenciando las exportaciones mineras (área morada) y el resto (área celeste), las que sumadas dan el total de exportaciones de bienes. Muestran su comportamiento entre enero del 1996, antes de la crisis asiática y noviembre del 2009.
Las cifras del primer gráfico están expresadas en Euro, para corregir la fuerte devaluación sufrida por el dólar en el período. Se aprecia que los volumenes record se alcanzaron a principios del 2006 y del 2007, cuando las exportaciones totalizaron del orden de 5.000 millones de euros por mes, cinco veces más que a principios de 1996.
Luego de caer a menos de 3.000 millones de Euro por mes a fines del 2008, se estabilizaron en el orden de 3.100 millones de euros mensuales a lo largo del 2009. Eso representa una caída en las exportaciones totales de cerca de 40 por ciento respecto de los valores máximos alcanzados antes de la crisis.
En el gráfico se puede apreciar que las exportaciones mineras (morado) se inflan extraordinariamente entre el 2003 y el primer trimestre del 2008, impulsadas en parte importante por la desenfrenada especulación que afectó a los mercados emergentes y materias primas durante ese período.
Luego de una caída brutal en la segunda mitad del 2008, en que el precio del cobre se redujo casi a la cuarta parte, las exportaciones mineras se han vuelto a inflar en el curso del 2009, impulsadas nuevamente en forma decisiva por la especulación en el precio del cobre.
Las exportaciones no cobre muestran un comportamiento mucho más estable. No se inflaron en la misma medida durante la burbuja y se mantuvieron estables hasta principios del 2009. El volumen de importaciones no-mineras incluso en su máximo fue sólo 2,5 veces los valores de principios de 1996, lo que representa un aumento del orden de 8,6 por ciento anual, medido en Euros.
Desde ese momento, sin embargo, no han dejado de caer y en noviembre del 2009 eran 1,9 veces el valor en Euros de principios de 1996, lo que representa una tasa de incremento promedio de 5,2 por ciento anual.
Una cosa muy diferente es lo que pasó con las exportaciones mineras – debido al incremento especulativo de los precios -, las que en su punto máximo en mayo del 2007 eran 7,7 veces su valor en Euros de principios del 2006. Hoy representan 4,6 veces dicho valor.
El gráfico que sigue muestra la misma evolución de las exportaciones, pero expresadas en dólares. Como se puede apreciar, el valor total se multiplica por siete entre 1996 y fines del 2008, alcanzando valores de 7.000 millones de dólares por mes, para caer luego a menos de 4.000 y rebotar luego a casi 5.000 millones de dólares mensuales.
Se aprecia que las oscilaciones del comercio exterior se agudizan con las fluctuaciones experimentadas por el dólar y especialmente su fuerte devaluación a lo largo de la última década.
Los gráficos que siguen muestran la variación de las exportaciones respecto del mismo mes del año precedente (azul) y la de los últimos doce meses respecto del período equivalente precedente (roja). Fueron elaborados por CENDA en base a datos del Banco Central obtenidos de www.bcentral.cl el 15 de enero del 2010.
El primero de ellos muestra que si bien en noviembre del 2009 las exportaciones de bienes dejaron de caer respecto de noviembre del 2009 (línea azul), estas últimas constituyen un mes bajo de comparación, puesto que ya habían sido afectado por la crisis.
Ello se confirma al observar que las exportaciones de los doce meses que terminaron en noviembre del 2009 continúan cayendo respecto de los doce meses precedentes. Aunque el ritmo de caída ha disminuido respecto del más de 30 por ciento que llevaba acumulado hasta octubre del 2008, continúa en niveles de contracción cercanos al 23 por ciento. Estas medidas son en dólares.
El repunte de las exportaciones del último mes se explican principalmente por las mineras, las cuales han rebotado más de un 50 por ciento respecto de noviembre del 2009, como se aprecia en el gráfico que sigue, obtenido de la misma fuente. Sin embargo, las exportaciones mineras de los últimos doce meses se mantienen todavía un 30 por ciento por debajo de los doce meses precedentes.
Ello se confirma al observar en el gráfico que sigue la evolución de las exportaciones no mineras, las que continúan cayendo hasta noviembre del 2009 si se comparan los últimos doce meses con el período precedente. Incluso noviembre del 2009 muestra todavía una caída de 9 por ciento respecto de noviembre del año precedente.
La fuerte caída de las exportaciones viene a confirmar la gravedad de la crisis y su especial efecto sobre la economía chilena, que es una de las más abiertas del mundo.
La caída del comercio internacional ha afectado seriamente el modelo exportador. Pasarán muchos años antes de recuperar los niveles de exportación previos a la crisis. Ello resultará bastante complicado para la economía chilena, la que deberá volverse mucho más hacia el mercado interno.
Probablemente, esta situación impulsará la construcción de un espacio más grande en América Latina, protegido y regulado por instituciones supranacionales al estilo de la Unión Europea.
Mientras tanto, la euforia de los mercados emergentes parece demasiado optimista, a juzgar por la complicada situación que enfrenta uno de los más inflados del mundo: Chile.
Manuel Riesco
Economista CENDA
El Ciudadano