El ayuntamiento de Honolulu ha sido objeto de muchas críticas el año pasado por no hacer frente a la falta de viviendas en la isla de Oahu; con agentes de la policía pendientes de las personas sin hogar, y una propuesta del ayuntamiento que pretendía trasladar a los sin techo a una remota isla lejos de la vista de los turistas.
Pero han cambiado de estrategia y quieren poner en marcha una idea diferente, adaptar los autobuses urbanos jubilados como vivienda de transición para personas sin hogar.
La empresa Grupo de Arquitectura 70 Internacional recogió el desafío para el diseño, y espera tener al menos tres instalaciones de autobús LIFT construida por voluntarios en la carretera este verano. Los autobuses proporcionarán refugio, duchas y recreación para algunas personas sin hogar de Honolulu.
Los mismos autobuses LIFT todavía están en funcionamiento, pero se van a retirar del servicio por su edad y elevado kilometraje. El Ayuntamiento ha acordado donar 70 de ellos para que se conviertan en refugios.
A diferencia de una casa rodante, que es básicamente una casa sobre ruedas, cada autobús será acondicionado para servir a un propósito distinto. Algunos tendrán camas para proporcionar refugio, otros proporcionarán duchas e instalaciones de higiene básicas, mientras que un tercer diseño permite espacio recreativo.
El diseño de los espacios se basa en la premisa de que pueda ser construido por un equipo de voluntarios no entrenados.
Grupo 70 está ahora buscando una asociación sin ánimo de lucro para asumir la ejecución del proyecto.