El Consejo Nacional de Seguridad Pública sesionó ayer en el Palacio de La Moneda. La jornada reunió a las máximas autoridades de instituciones directamente ligadas a la persecución de los hechos delictuales que afectan a la sociedad. En la primera reunión del año, Jorge Burgos, ministro del Interior, dio a conocer las conclusiones más importantes.
El Ministro decidió aumentar la urgencia con que se discute el proyecto de agenda corta, que en un principio estaba catalogada bajo urgencia simple, ayer, junto con Javiera Blanco, ministra de Justicia, trasladaron la medida entre las principales conclusiones.
La indicación presentada por la comisión de la Cámara sobre el control de identidad preventivo, el cual permite a Carabineros controlar la identidad de una persona sin que esté delinquiendo, es uno de los elementos más polémicos dentro de los trabajos que buscan detener la delincuencia en el país, debido a que la acción atentaría contra los derechos humanos de todos los ciudadanos que transitan libremente por las calles del país.
La ley dice que la reunión debe hacerse, como mínimo, una vez al año. Burgos manifestó que deberían tener a lo menos una reunión cada dos meses, donde los asesores presenten su postura y envíen agendas previas a sus miembros para su discusión y de esa forma coordinar políticas públicas en conjunto con quienes trabajan en la iniciativa.