El vicepresidente de Finanzas de SQM, Ricardo Ramos, declaró ante la fiscalía el pasado 22 de junio respecto a los pagos que la minera no metálica hizo a la sociedad Asesorías y Negocios (AyN), de propiedad del operador político del PPD Giorgio Martelli, y a la firma Cristián Warner Comunicaciones, la mano derecha de Marco Enríquez-Ominami.
Según señala El Mercurio, las preguntas apuntaron a los pagos realizados por la filial de la minera, SQM Salar, a AyN y a la sociedad del ex secretario general del PRO y estrecho colaborador de ME-O entre 2012 y 213, por montos de cerca de $246 y $215 millones, respectivamente.
Ramos testificó que nunca había escuchado de estas firmas, que los pagos no tenían respaldo y que los trabajos encontrados eran de mala calidad e inútiles para la minera, por lo fueron rectificados ante el Servicio de Impuestos Internos (SII).
El ingeniero le indicó a la fiscal Carmen Gloria Segura que «había en el clóset (del ex gerente general Patricio) de Contesse varios documentos, papeles y libritos encuadernados, algunos relacionados con SQM y otros con SQM Salar (…) También encontramos dos grupos de libros encuadernados, unos blancos que me parece que eran 24 y decían Asesorías y Negocios, adentro cada uno tenía unos CD y el papel de las hojas era de buena calidad; vi el contenido de uno de los libros y me pareció malo, no me pareció información de interés para la compañía, eran cosas muy generales y nada específico con SQM. También había documentos de Cristian Warner Comunicaciones, eran varios, no recuerdo cuántos, no tenían CD, pero eran de peor calidad que los de AyN».
En ese sentido, Ramos precisa que «nunca escuché del gerente general Contesse la palabra Asesorías y Negocios, ni el nombre Martelli, y tampoco nunca escuché de Contesse hablar de ninguno de estos informes (…).»
«Pesentamos rectificatorias de impuesto a la renta desde el AT (año tributario) 2009 a 2014 por SQM Salar (…) entre ellas incluimos los gastos por AyN y Warner, y allí rectificamos la gran mayoría de los gastos, y rectificamos porque no teníamos al usuario final, no conocíamos a los prestadores, no los veíamos nunca en la empresa; además, no había documentos respaldatorios y los que había, en nuestra opinión y en la opinión del SII, no eran suficientes para respaldar los gastos, como en el caso de Cristian Warner y AyN», explicó.
En otra parte de su declaración, el vicepresidente de Finanzas de SQM cuenta que el actual gerente Patricio de Solminihac, el jefe de Finanzas Gerardo Illanes y él hablaron con el asesor tributario Pablo González sobre dichos informes, quien «nos recomendó mandarlos al SII para que los periciaran y determinaran si eran informes legítimos. Yo revisé parcialmente uno y lo que leí era muy malo, no era útil para la empresa, y no resultaba procedente pagar por ellos $240.000.000 a AyN, por ningún motivo».
«El SII compartió nuestra opinión y nos dijo que rectificáramos por los gastos a estas dos últimas empresas. Además de los libros de AyN y de los de Cristian Warner Comunicaciones, mandamos al SII los contratos de SQM Salar con Warner y con AyN presentados por Martelli», sostuvo.
Finalmente expone que «yo no vi las facturas y los comprobantes de pago a AyN y a Cristian Warner y copias de los documentos de pago, tanto de cheque y transferencias bancarias. Eso lo pidió nuestro asesor tributario Pablo González (…) Y lo mandó directamente al SII».
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