En pleno siglo XXI toda avanza a una velocidad vertiginosa. En todos los ámbitos avanzamos tan deprisa que, si estás un par de meses descolgado de la actualidad, no te llegas a creer cómo es que han cambiado las cosas.
Uno de los ámbitos que está avanzando más rápido, y que más dolores de cabeza trae, es la investigación genética. Este tipo de estudio siempre va unido, inevitablemente, a las leyes éticas y morales que supone la modificación y creación de especies nuevas ya que, no sabemos muy bien qué reacción pueden llegar a provocar estos “individuos” en un medio natural, sin ningún tipo de control. Si a esto agregamos el uso de algunos genes humanos en otras especies, las cuestiones ético-morales aumentan cada vez más, y la barrera entre lo que está bien y lo que está mal se empieza a difuminar de forma peligrosa.
¿Qué son los animales transgénicos? Son animales que han sido modificados genéticamente cambiando alguna secuencia de su ADN para conseguir un efecto determinado.
Estas operaciones pueden tener como objetivos principal el avance en tratamientos de determinadas enfermedades, la fabricación de algunos medicamentos de forma endógena, los xenotransplantes (uso de órganos animales en humanos sin posibilidad de rechazo) o fines puramente comerciales como el cambio de características puntuales de determinados animales por puro interés económico.
Hoy en día no existe ningún animal transgénico que esté legalmente permitido para el consumo humano. Esto no impide que se siga estudiando en este sentido para crear animales de granja con ciertas ventajas sobre los ya existentes.
1. Las vacas Belgian blue
Esta raza, excesivamente musculosa de vacas, no corresponde con un animal transgénico, porque no se han modificado genéticamente en un laboratorio.
Su impactante existencia es producto de la crianza selectiva por parte de los humanos juntando a los especímenes más grandes de esta raza, provocando así la hipertrofia muscular en estos animales. Estas vacas son aptas para el consumo humano y, de echo, he escuchado que su carne es muy sabrosa. Debido a su condición genética estos animales desarrollan entre un 15 y un 20% más de masa muscular, lo que se traduce en más carne por el mismo precio.
2. La oveja 15% humana
Un profesor de la Universidad de Nevada es el responsable de este inusual animal. 7 años y casi 5 millones de libras esterlinas (7.000.000 de €) han sido necesarios para crear este híbrido.
Esta oveja permitirá, en un futuro cercano, utilizar sus órganos para ser transplantados a humanos en caso de enfermedad y necesidad. El hígado, el corazón, los pulmones, y el cerebro son las partes que más cantidad de material genético comparten con el ser humano.
3. La vaca que da insulina
La estructura genética de este animal se modificó para que produjese leche con una especie de insulina muy similar a la que producimos los humanos y que tanta falta le hace a los diabéticos.
Las vacas producen de este modo una molécula que se llama precursora de la insulina y que, con tan solo añadirle una proteína en el laboratorio, se convierte en insulina normal. La gran ventaja frente a otros estudios es que antes, las vacas que producían insulina en la leche morían debido al exceso de esta, pero ahora, al no fabricar realmente la insulina no corren ningún tipo de peligro. La insulina utilizada antes provenía del páncreas del cerdo y era de mucha peor calidad. Además de ser mucho más cara y difícil de obtener
4. Los Glofish o peces brillantes
Esta es una clara prueba de que, no siempre, las modificaciones genéticas se llevan a cabo en beneficio de la humanidad sino que, a veces, es con beneficios puramente económicos.
La modificación de estos peces, en un principio, era para detectar la contaminación ambiental, pero puesto que no sirvieron a su cometido se les buscó otra salida menos ética. Estos peces cebra están modificados con una proteína procedente de las medusas que hace que brillen ante la luz blanca o ultravioleta.
5. La rana translucida
Hace cuestión de 8 años, en Japón, se crearon ranas translucidas cruzando genes de 2 especies de ranas japonesas. Su utilidad es la de poder estudiar el efecto de químicos en sus órganos, el desarrollo del cancer etc. en estos animales.
Las ranas transparentes ofrecen un método más rápido y más barato a la hora de realizar diversos estudios ya que al no tener que diseccionarlo se ahorra tiempo, y sobre todo, vidas.
6. ANDi el primate modificado genéticamente
En realidad lo único que se buscaba era probar que se puede alterar la secuencia genética de un ser tan complejo como un primate para introducir luego otras modificaciones que si puedan ser útiles para la cura de determinadas enfermedades como el Alzheimer o el Cáncer.
Al ser un animal tan cercano genéticamente a los humanos las voces en contra de este tipo de investigación se han alzado por todo el mundo.
7. El salmón que da más carne
Este pez lleva incorporado un importante gen del crecimiento el cual provoca que estos alcancen un tamaño 200% más grande que el de cualquier salmón común y corriente.
Todavía no está permitida su comercialización ni su consumo en humano,s pero ya están exportando huevos no fértiles a Canada, lo que es un paso más cerca.
8. Los cerdos que pueden donar a humanos
Después de varios intentos han conseguido crear un cerdo que produce un antígeno que haría mucho más fácil la aceptación del órgano transplantado por parte del humano receptor.
Vía: http://purotrend.com