Este miércoles el parlamento griego vota para aprobar o no las medidas impuestas por el Eurogrupo como condición para continuar en el euro y recibir el tercer rescate. La mitad de la dirección de Syriza, se rebeló en contra del acuerdo al que llegó el primer ministro griego, Alexis Tsipras, con los socios europeos para acceder al tercer rescate.
El paquete de medidas debe ser aprobado hoy por el parlamento heleno, pero la fracción más radical de Syriza, Plataforma de Izquierda, ya ha anunciado que tiene previsto votar en contra. La situación por la que atraviesa Grecia deja en una posicón muy difícil a Syriza, pues se divide entre aquellos que mantienen una postura intransigente en cuando a acceder a las imposiciones europeas, y los que prefieren ceder para continuar en el euro.
Este miércoles, el ógano de dirección de Syriza, el comité central, rechazó por mayoría absoluta aceptar el acuerdo al que llegaron en Bruselas el pasado domingo. El documento redactado por el comité central denuncia: «El 12 de julio se llevó a cabo un golpe en Bruselas que demostró que el objetivo de los líderes europeos era la derrota ejemplarizante de un pueblo que contemplaba que se podía seguir otro camino más allá del modelo neoliberal de la austeridad extrema«.
Frente a todas estas reacciones en contra del acuerdo, el primer ministro griego ha defendido: «Negociamos lo mejor que pudimos, que nadie dude de la intención y el esfuerzo del Gobierno de hallar una solución aceptable (…) Pero estoy abierto a cualquier alternativa realista que haya podido pasar por alto«.
De cara a la votación, Tsipras ha explicado: «O estamos todos juntos esta noche o mañana tendré muy difícil seguir siendo primer ministro«.
Mientras se lleva a cabo esta votación, en las puertas del parlamento se enfrentan fuerzas de seguridad y manifestantes en una jornada de disturbios con cócteles molotov y gases lacrimógenos.