Cada día vemos más padres dando a sus hijos tablets, móviles, y todo tipo de aparatos electrónicos. Incluso, por momentos parece que muchos de esos padres lo que hacen es reemplazar a las niñeras, cuidadoras, abuelas, y hasta el propio cariño y atención de los padres, con este tipo de aparatos electrónicos. Es muy fácil darle a un niño pequeño un aparato electrónico que brille, hace luces y hace sonidos, y además tiene instalados juegos muy bonitos, y dejar al pobre muchacho o muchacha desatendido durante horas, ahí jugando inocentemente… Si eres un padre así puede que creas que porque tu hijo se ría, es feliz, pero… estas cometiendo una auténtica locura y no deberías de darles ningún tipo de aparato electrónico, y menos aún durante horas. MAL, MAL, y MAL. Aprende por qué Steve Jobs no lo hacía (siendo el creador de las tablets) y por qué tú tampoco deberías hacerlo:
La tecnología esta claro que puede cambiar nuestras vidas para bien. Hoy mismo puedes comprar un billete de avión online barato a Nueva York, o ver un documental en Youtube que se estrenó hace 40 años. Puedes conocer a tu pareja, o puedes leer artículos tan estupendos como estos si nos sigues en la página de Facebook de EcoRemedios. La tecnología avanza, los tiempos tan bien, y hay que aceptar estos adelantamientos tecnológicos, y hacer uso de ellos para desarrollarnos como civilización. Pero hay que saber marcar la linea de cuando es “demasiado”. Y desde luego, ver a un beber durante 3 horas jugar con una tablet, y no verle estar jugando con su padre, madre, o abuelos… es algo muy triste y lamentablemente el pan nuestro de cada día. Esto debe cambiar.
Y esto fue lo que contestó Steve Jobs cuando aún vivía, un día que le preguntaron en una de sus entrevistas más famosas:
“Mis tres hijos me acusan de ser algo fascista en casa en torno al uso de tablets, y es que actúo como un dictador y les impido hacer uso de este tipo de tecnología. Dicen que los padres de sus amigos no tienen este tipo de impedimentos, y que por qué ellos no pueden estar con la tablet o los móviles todo el día embobados. Pero eso es porque yo Steve Jobs, y mi mujer, hemos visto lo que la tecnología en exceso puede llegar a hacer a alguien. A alguien adulto. Imagina a unos niños. Yo no quiero ver que eso ocurra con mis preciados pequeños”
Muy sabias palabras antes de desgraciadamente morir de cáncer. ¿Acaso creen que no tiene razón? Estoy seguro que sin ir más lejos, cualquier de ustedes puede hacer memoria y caer en algún conocido o caso visto de niños todo el día mirando su teléfono móvil, incluso a una pequeña edad ya estar haciendo uso de aplicaciones para “mayores” como puede ser el Whatsapp. Es una locura que debería de acabar pero que, desgraciadamente parece que somos tan solo unos pocos quienes pensamos así, pues cada día podemos ver a padres regalando tecnología a sus hijos cada vez más pequeños.
Un niño con demasiado tiempo de móvil o uso de tablets, puede desarrollar problemas tan grave como la adicción al aparato electrónico, a desarrollar síndrome de hiperactividad que le perseguirá durante toda la vida y por lo que los psicólogos y psiquiatras acabarán recetando anfetaminas legales pero tan malignas para el cuerpo como las ilegales. ¿Queremos unos hijos adictos al speed farmacéutico? ¿Queremos condenarles a depender de un teléfono móvil? ¿A que no lean libros y sólo lean pixeles en pantalla? ¿A que se transformen en sedentarios desde bien enanos, y acaben por convertirse en obesos, o peor aún, llegar incluso a desarrollar un tumor cerebral?