En nuestro país el 25% de las búsquedas de ejecutivos de primer y segundo nivel se realizan por medio de Head Hunters, el restante 75% continúa basándose en conocidos y referencias de terceros. Si consideramos esos antecedentes, entenderemos porque el tener una actitud activa por parte del que quiere cambiar su trabajo es fundamental. Podemos decir que el primer trabajo para quien quiere cambiar de trabajo, es buscar trabajo, y para ello existen algunos tips que nos pueden ayudar en el proceso.
Lo primero es usar y estar activo en las redes sociales. El 79% de los profesionales consideran que quien cumple esa condición tiene más oportunidades de lograr su objetivo final. Sin embargo, a pesar de la proliferación de redes sociales y laborales, aún son pocos los usuarios que aprovechan su verdadero potencial.
No basta con escribir y publicar cualquier tipo de contenido, es necesario planificar y definir los objetivos que perseguimos, el posicionamiento que deseamos tener en las redes, cómo queremos ser percibidos y cómo desarrollaremos nuestra identidad virtual como marca. El proceso se inicia como toda definición estratégica, conociendo nuestras fortalezas y debilidades, a quién queremos afectar, qué queremos lograr e identificando dónde miran y están las empresas y profesionales con los que queremos trabajar.
Además, es aconsejable hacer una separación entre los contenidos personales de los profesionales. Hoy las empresas buscan profesionales con vida, que tengan desafíos, que tengan hobbies y pasatiempos, pero que demuestren respeto por otros, que cuiden sus opiniones y que demuestren compromiso con sus actuales empleadores. Ya no basta con ser especialista en algo, estamos en la era de las habilidades blandas, en que el liderazgo, el compromiso y la persona son las que hacen la diferencia en la creación de valor de nuestras empresas.
Otro aspecto fundamental es asumir que buscar trabajo es un asunto de redes. No se trata tanto de una acción como de una actitud permanente. El objetivo es dejar de buscar trabajo y empezar a conocer gente, pero no cualquier tipo. Buscar personas que pueden ser de utilidad en nuestros proyectos, juntarse con ellos, interactuar en foros relevantes y, por supuesto, mostrar los logros y aprendizajes que hayamos logrado en nuestra vida profesional.
Muchas veces creemos que al subir nuestros CV a una red estamos en el sistema. Hoy el mercado es más complejo, se requiere participación activa, entender que lo profesional y personal en el mundo virtual están irremediablemente unidos y no olvidar nunca que lo que estamos buscando son oportunidades laborales y formas de colaboración con nuestra red. Cuanto más grande sea nuestra red de contactos su nivel de utilidad será mejor, y cultivarla a través del tiempo también es parte de nuestro trabajo, después de todo, buscar empleo, es un trabajo en sí mismo.