La edad de un libro suele considerarse cuando éste tiene una edad relativamente avanzada. Los clásicos de más de 50 ó 100 años son recordados por la fecha en la que asombraron al mundo por su contenido. Es extraordinario cómo hay libros que han hecho temblar al mundo literario cuya publicación es muy cercana a nuestros días.
Por suerte, Internet ha permitido que el flujo de información recopile la publicación de los libros más importantes del año desde 1911 hasta 1999. Casi un siglo de literatura está lleno de obras maestras y joyas escondidas que han moldeado el pensamiento de los últimos años. Hay libros de más de 50 años que han demostrado ser clásicos por su temporalidad e impacto. Si naciste entre 1984 y 1999, descubre cuál fue el libro que se publicó en el año de tu nacimiento.
1984 – La insoportable levedad del ser (Milan Kundera)
La obra maestra de Milan Kundera es una historia de amor; un ensayo filosófico y social, y un análisis de nuestros tiempos contado desde la vida de cuatro personas en los disturbios sociales que sucedieron en Checoslovaquia en 1968.
1985 – Ruido de fondo (Don De Lillo)
Aunque este año Gabriel García Márquez también publicó su joya llamada El amor en los tiempos del cólera y Cormac McCarthy entregó su perturbadora obra Meridiano de Sangre, Ruido de fondo habla de la sociedad posmoderna de la época de manera magistral; desde una crítica a la vida académica pasando por la visión de la familia. De Lillo se consagró como uno de los autores más importantes del siglo.
1986 – Eso (Stephen King)
Esta obra de más de mil 500 páginas fue el mejor Best Seller del año. Es además uno de los libros más complejos de Stephen King, lo que es mucho decir para un autor que llega a publicar dos novelas por año. La historia de un ser que adopta diferentes formas para asesinar y así nutrirse de las personas ha convertido a los payasos en seres aterradores para toda una generación.
1987 – Tokio Blues (Haruki Murakami)
La quinta novela del escritor japonés lo consolidaba entre los mejores escritores de su generación. A pesar de que este libro es una de sus grandes obras, 1987 fue un importante año para la literatura en el que se publicó la novela de crecimiento de Fernando del Paso llamada Noticias del Imperio y la aclamada Hoguera de las Vanidades del estadounidense Tom Wolfe.
1988 – El Alquimista (Paulo Coelho)
Milan Kundera sorprendió al mundo de nuevo con su novela La inmortalidad, pero fue Coelho con este libro con el que se posicionó en el imaginario colectivo. Con frases como “Cuando quieres realmente una cosa, todo el universo conspira para ayudarte a conseguirla”, el autor ha vendido más de 65 millones de copias con esta, su más famosa, publicación.
1989 – Los pilares de la Tierra (Ken Follet)
Esta novela marcó la segunda fase en la carrera literaria de Ken Follet. La primera se caracterizó por tener rasgos de las clásicas novelas de espionaje, pero con Los pilares de la Tierra el autor incursionó en novelas históricas de gran realismo en el que toca diversos temas: desde la alimentación de la gente en el siglo XII, la arquitectura gótica, pasando por la filosofía y la teología.
1990 – Anochecer (Isaac Asimov)
En los últimos años de su vida, Assimov revisó sus cuentos cortos y para mejorarlos. Así fue cómo se publicó una de sus últimas obras en 1990. Kalgash es un planeta ficticio parecido a la Tierra, pero con seis soles, que pronto deberá enfrentarse a la completa oscuridad, un fenómeno que sucede en el planeta cada 2 mil 49 años. A partir de ese momento se desarrollarán las ideas de un genio que cada vez más parece acertar el futuro de la humanidad.
1991 – El Evangelio Según Jesucristo (José Saramago)
Las narraciones de Saramago son complejas y esta obra, en la que narra la vida no contada del padre de Jesús, en la que la culpa y el remordimiento por creer que pudo evitar el asesinato de infantes durante el nacimiento de su hijo, revela un lado mucho más humano de la religión. Después seguirá esta historia ficticia contando la vida de Jesús a partir de la muerte de su padre hasta su encuentro con Dios, el diablo y su destino.
1992 – Todos los hermosos caballos (Cormac McCarthy)
El inicio de una de las trilogías que definen a Estados Unidos comienza con esta novela publicada el mismo año que Doce cuentos Peregrinos de Márquez o el Leviatan de Paul Auster. Un libro difícil de leer por la sintaxis experimental del autor; a través de un romanticismo poco usual en las últimas páginas nos regresa a su habitual salvajismo para hacernos caer en una espiral de desolación en las secuelas de este clásico contemporáneo.
1993 – Trainspotting (Irvine Welsh)
Quizá Welsh no sería el autor reconocido que es hoy sin la adaptación que se hizo de su obra tan sólo tres años después de la fecha de publicación. La historia de un grupo de drogadictos, sus viajes con heroína, el hartazgo de una vida escocesa, la purificación y la madurez son parte de una de los libros cuya crudeza dio voz a muchos autores después de Welsh
1994 – Del amor y otros demonios (Gabriel García Márquez)
La mordida de un perro rabioso es la perdición de Sierva María de Todos los Ángeles, pues su madre no presta atención a la mordida y poco a poco su sufrimiento, combinado con el conocimiento de su época, la llevaron a ser víctima de un exorcismo. Márquez, quien no era gustoso de que sus obras pasaran a la pantalla grande, dejo que se adaptara una opera en 2008, y un año después cedió ante la adaptación fílmica.
1995 – Ensayo sobre la ceguera (José Saramago)
A pesar de que Saramago dejo de escribir por más de 30 años debido al poco éxito que tuvo al principio, cuando su talento fue reconocido por todo el mundo se convirtió en un prolífico autor. Cuatro años después de entregar el libro que no gustó nada a la Iglesia Católica, regresó con esta metáfora acerca de la verdad y un estudio de la sociedad en la que vivimos. Casi diez años después retomaría el tema con Ensayo sobre la lucidez.
1996 – La broma infinita (David Foster Wallace)
Esta es considerada uno de los libros más importantes de los últimos años. Su extensión de más de mil páginas, sus diversos temas, la ficticia vida en la que las corporaciones dan nombre a los años y más, hacen de este libro, junto con Underworld de Don DeLillo las obras más reconocidas de la literatura posmoderna. Llena de notas al pie e incluso notas en las notas, las muchas caras de la novela hacen que sea una de las obras literarias que tienen un lugar asegurado entre las grandes de la humanidad.
1997 – Pastoral Americana (Philip Roth)
El “Sueco” es el nombre del protagonista, quien siguiendo los modales y costumbres de su época es considerado un modelo a seguir en prácticamente todos los hábitos. Pero la forma en la que la sociedad se ha moldeado demuestra que una cosa es la que nos enseñan y otra lo que realmente sucede en la vida real. El Sueco pasará diversas situaciones que mostrarán la verdadera cara de una nación con un trastocado “Sueño Americano”.
1998 – Los detectives salvajes (Roberto Bolaño)
Esta es la quinta novela del escritor chileno que pasó gran parte de su vida en México. Quizá su obra maestra sea 2666, pero Los detectives salvajes es una historia de aventura; según el propio autor “intenta reflejar una cierta derrota generacional y también la felicidad de una generación, felicidad que en ocasiones fue el valor y los límites del valor”.
1999 – Desgracia (J.M. Coetzee)
El libro que cerró el milenio fue el del sudafricano J.M. Coetzee, quien junto al japonés Murakami entregaron las dos últimas obras maestras en el crepúsculo de un siglo marcado por el modernismo, la ruptura y la entrada a un nuevo universo literario.
Vía: http://culturacolectiva.com