La música clásica despierta en nosotros una inmensa variedad de emociones. Somos capaces de sentirnos eufóricos escuchando La Cabalgata de las Valkirias de Wagner o ponernos melancólicos con los primeros compases de La Sonata del Claro de Luna de Beethoven.
He de reconocer que de primeras puede costar bastante el meterte en este mundo de melodías tan exquisitas ya que nuestro oído está acostumbrado a otro tipo de sonidos musicales más pop y sencillos. Hay infinidad de sonatas y tonadas que hemos escuchado, que recordamos y nos gustan, por lo que no hay motivo por el que no podamos investigar un poco más en este estilo. Siempre puedes probar con versiones un poco más modernas y remezcladas de los clásicos. El caso es que ninguna música es mala si a ti te gusta.
Lo que la música clásica nos ha enseñado es que si quieres que algo suene bien, hay que dedicarle tiempo; y mucho tiempo es lo que le ha debido dedicar este joven músico Ukraniano llamado Aleksander Hrustevich hasta llegar al nivel de control sobre el acordeón que podemos ver en el siguiente vídeo.
Ejecuta de una manera magistral, increíble y todos los adjetivos que digamos son pocos, esta pieza perteneciente a Las 4 Estaciones de Vivaldi. Concretamente es la que corresponde al invierno.
Dadle al play y quedaos con la boca abierta.
Fuente: Timatito