Jaime Mendoza Collío, joven mapuche, es perseguido por varios kilómetros para luego ser asesinado de un disparo por la espalda. El autor de su muerte fue identificado, acusado y penalizado para luego ser absuelto por la justicia militar. Su familia ha recorrido por casi seis años un largo camino de dolor y lucha para exigir justicia.
El 12 de agosto del 2009, durante el primer gobierno de Michelle Bachelet, la comunidad mapuche “Requem Pillán” ubicada a 20 kilómetros al sur de Collipulli, ingresó pacíficamente al predio del fundo San Sebastián como parte de su lucha reivindicativa de recuperación territorial productiva. En esos años este sector estaba completamente sembrado con pinos y eucaliptus de propiedad de las empresas forestales Mininco y Bosques Arauco.
Fuerza Especiales de carabineros procedió a desalojar violentamente disparando lacrimógenas, balines y perdigones en contra de familias completas. En la acción muchos resultan heridos y son detenidos.
Varios comuneros son perseguidos por más de 4 kilómetros bajo constantes disparos. Antes de llegar a un canal que divide dos predios. Fue en ese momento en que el cabo de carabineros Miguel Jara Muñoz dispara por la espalda a Jaime Mendoza Collío de 24 años causándole la muerte.
Carabineros intentó tergiversar el episodio pero se descubrió pronto el engaño, señalándose en investigaciones posteriores que las pruebas habían sido alteradas para que pareciera que el funcionario había sido atacado con disparos. Finalmente el cabo Jara fue condenado a cinco años y un día lo que posteriormente es revocado por el tribunal de alzada militar.
Fuente: werken.cl