Cada día, durante los últimos seis años, cinco mujeres de la provincia central de Shaanxi se levantan a las cuatro para cuidar a perros callejeros.
Las señoras tienen su propio asilo, y cada día, a las 4 de la mañana, estos afortunados perros consiguen 400 kg de comida. El refugio comenzó a funcionar en 2009, liderado por Wang Yanfang, una mujer de 60 años. Esta amante de los animales se ha financiado exclusivamente por las donaciones de generosos admiradores.
Ya son 1300 los perros que las generosas ancianas chinas cuidan. No tienen días libres, siempre están junto a los perros abandonados que cuidan, renunciando a las fiestas chinas mas celebradas. Una de las mujeres admite que los perros no siempre son amables, ya que en ocasiones reciben mordeduras y pellizcos. Sin embargo, eso nunca impidió que Wang siga queriendo cuidar de todos ellos.
“Son como mis hijos, no puedo soportar estar separada de ellos, o perderlos”, dice Wang, que sigue firme en su tarea cotidiana de amor y ternura animal. Ella y las demás mujeres se dedican en cuerpo y alma a intentar que la vida de los perros callejeros abandonados de su localidad sea un poquito mejor. Y su ejemplo ya ha llegado a todo el mundo, porque el amor siempre inspira.
Fuente: Ecoinventos /Buen Diario