El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha convocado elecciones legislativas anticipadas para el 1 de noviembre, tras expirar este domingo el plazo legal de 45 días para formar Gobierno.
El gubernamental partido islamista AKP, que fundó Erdogan, perdió por primera vez desde 2002 su mayoría parlamentaria en los comicios del 7 de junio, y el primer ministro en funciones, Ahmet Davutoglu, fracasó en su intención de formar un Ejecutivo de coalición.
Aunque el presidente cuenta con atribuciones para convocar elecciones anticipadas, es la primera vez en la historia moderna de Turquía que el jefe de Estado, que tiene un rol más bien simbólico, fuerza una cita con las urnas, un paso que siempre había quedado en manos del Parlamento.
En el comunicado de Presidencia en el que se informa de la convocatoria de elecciones no se especifica una fecha, aunque la Junta Electoral turca ya propuso la pasada semana el 1 de noviembre, y Erdogan respaldó públicamente celebrarlas ese día.
El presidente turco ha generado polémica al dejar que expirase la semana pasada el plazo para formar gobierno sin entregar el mandato al socialdemócrata partido Republicano del Pueblo (CHP), el segundo más votado en las elecciones de junio.
Una vez publicada oficialmente la convocatoria, el país tiene ahora cinco días para formar un Gobierno de transición, que muy probablemente dirigirá Davutoglu. Erdogan tiene mañana a las 08.00 GMT una reunión con Davutoglu, en la que probablemente le de el encargo de formar ese Ejecutivo de transición.
En ese Gobierno interino que llevará al país a los comicios deberían estar representados todos los partidos del Parlamento, aunque dos formaciones, el CHP y los nacionalistas del MHP ya han declarado que no piensan participar en él. De esta forma quedarían en ese Gobierno interino el islamista AKP y el partido izquierdista prokurdo HDP, en la que sería su primera participación en un Ejecutivo turco.
Davutoglu ha asegurado que esperará a los nombres propuestos por las formaciones para los cargos ministeriales, y en caso de no llegar, nombrará a personas con un perfil técnicos.
Este Ejecutivo no requiere de un voto de confianza en el Parlamento y tampoco presentará un programa de gobierno. Numerosos analistas han subrayado que Erdogan ha presionado para convocar nuevas elecciones para que el islamista AKP recupere la mayoría absoluta que perdió en junio y pueda gobernar en solitario.
Uno de los deseos declarados de Erdogan es que el AKP logre una mayoría amplia para enmendar la Constitución y reforzar el cargo presidencial con atribuciones ejecutivas.
Turquía afronta las elecciones anticipadas metida en una espiral de violencia desde la ruptura, el mes pasado, del alto el fuego vigente durante dos años entre el Estado y la guerrilla kurda del PKK.
LibreRed/EFE