Aldo Valle, vicepresidente del Consejo de Rectores (CRUCh) y rector de la Universidad de Valparaíso, afirmó que la gratuidad es urgente para miles de estudiantes y sus familias y reconoció que el proyecto de reforma a la educación sigue inmaduro y sin discusiones políticas ni propuestas claras y desarrolladas.
La autoridad académica explicó en una entrevista a Cooperativa que en la reforma todavía hay demasiado debate y conversación pública que hacer ya que “desgraciadamente el gobierno postergó de manera inconveniente e innecesaria” la situación, esto en relación a la poca claridad y falta de compromisos concretos que hasta el Mineduc y la Presidenta han mostrado a través de un desinterés hacia las demandas y petitorios del movimiento estudiantil.
La discusión de la reforma es importantísima en términos de dar a conocer a la ciudadanía el diseño, la estructura y finalmente descubrir una participación abierta a todos los actores de la sociedad en el desarrollo de un sistema de educación superior en el país que sigue en pañales y dando respuestas escuetas poco resolutivas a quienes luchan a diario en las calles y en las casas de estudio por conseguir un proyecto que entregue garantías y certezas para futuras generaciones de estudiantes.
Además dijo que la importancia está en hablar sobre la reforma “para no quedarnos de manera sesgada en discutir sobre gratuidad”. Y es que los desaciertos que ha tenido el organismo (Mineduc) en las formas de llevar los puntos y avances del proyecto han sido reincidentes y probablemente más críticos y complejos que los métodos simples y básicos a los que estaba recurriendo últimamente.
Ignacio Sánchez, rector de la Universidad Católica, manifestó hace unos días que primero debe aclararse el tema de la reforma a la educación superior, los temas de calidad y acreditación para después entrar en materia de financiamiento y gratuidad a lo que Valle, tajantemente respondió que no estaba de acuerdo ya que la gratuidad es urgente y debe (el Gobierno) ponerse en el lugar de todos los chilenos que “mes a mes tienen que desembolsar sumas muy importantes en relación a sus ingresos”.
La afirmación comprende a la mayoría de los ciudadanos que deben pagar por una educación digna, de esa manera Valle recalcó que la gratuidad se debe implementar desde 2016, indudablemente y “no debe confundirse con la necesidad de tener una discusión plural, amplia, acogedora de las distintas perspectivas que hay con la reforma a la educación”.
Nicolás Fernández, vocero de las Ues. privadas dentro del CONFECh, conversó con El Ciudadano sobre las declaraciones de Valle y dijo que los estudiantes quieren centrar el debate en donde tiene que estar y que la reforma no es una reforma no es un compilado de temas, es una reforma sistémica en su conjunto. “Ver gratuidad separado de los temas es no entender cómo planteamos la transformación en la educación. Es por eso que estamos de acuerdo con que está falta de muchísimas cosas, ya que el debate no se está dando en su totalidad, sólo focalizando en gratuidad”.