El liderazgo que está marcando dentro de la Alianza el senador por la X región norte, Andrés Allamand, se ha dejado ver en las últimas semanas. Su llamado a “no canonizar” a la autoridad, realizado en la reunión del Instituto Chileno de Administración Racional de Empresas (Icare), no pasó inadvertido. Le respondieron Bachelet y los ministros, pero el no se retractó de ninguna de sus palabras: “lo que he hecho es hacer un rayado de cancha, la ciudadanía tiene el derecho de exigir a la autoridad buenos resultados. Cuando se genera la cultura del aplauso fácil, en definitiva se termina por no exigir respuestas a la autoridad y ésta termina no cumpliendo con su cometido”, remató en conversación con El Ciudadano.
El Senador RN, está consciente de las divisiones de la Alianza y dice que “no se puede andar como el perro y el gato y unirse sólo cuatro meses antes de las elecciones”. Plantea que no se ve como un sucesor de Piñera porque “no está para andar aserruchando pisos” y que prefiere potenciar la votación obtenida por el exitoso hombre de negocios. Sin embargo, pudimos ver -en entrevista que concedió a otro medio nacional- que su posición será de “reserva” por la titularidad. «A lo más voy a estar en esa carrera desde una lógica subsidiaria. Si los que van en el primer lugar, por alguna razón, tropiezan, obviamente que uno tiene que estar en disposición de asumir esa responsabilidad» aclaró Allamand.
LOS ERRORES DE LA ALIANZA
La Alianza, conglomerado político formado por Renovación Nacional (RN) y la Unión Demócrata Independiente (UDI), hace rato que arrastra problemas internos. Su forma de moverse en la extra-política ha sido agresiva, las descalificaciones y “chuecuras” entre los bandos tienen prolongada data.
En 1987, cuando se formaba RN para ser el único partido de derecha nacional, se recuerda la llegada de Longueira con una micro llena de “flaites”, al momento de la votación general –de ahí su sobrenombre “Pungueira”. Luego de este acto, el líder UDI y Jaime “Cerebro” Guzmán, son expulsados de RN.
En 1992, en momentos que Piñera enfrentaría a Evelyn Mathei por la presidencia del partido, un nuevo acto de “inteligencia” sale a la luz pública: se trata de la grabación telefónica a una conversación privada entre el empresario y un amigo, en la que Piñera daba instrucciones para que se presionara a la fémina en un programa de TV. La conversación habría sido grabada desde el Comando de Telecomunicaciones del Ejército, lo que demuestra la relación de los militares con la extrema derecha en temas de política, aunque esto haya sido negado hasta el cansancio. Más aún, meses después, Piñera inicia una investigación para dar con los responsables de la grabación telefónica ya que se estaba infraccionando la Ley de Telecomunicaciones, pero sucede que un par de tipos secuestra a uno de sus hijos, obligándolo a llamar a su padre desde una cabina telefónica para que desista de seguir con las indagaciones. Piñera se detiene, se baja de la carrera presidencial de 1992 y nunca se supo qué tipo de organismo de inteligencia fue el que realizó el rapto.
La historia parece no acabar: en 1997, en momentos que sonaba como presidenciable, nuevamente Andrés Allamand es víctima de ataques, dirigidos por Francisco Javier Cuadra, quien -apoyado por declaraciones de Matthei y Longueira- denuncian que el “crespo” Allamand, consumía drogas.
Con el fuerte tema rondando en la opinión pública, Bombal y la UDI aprovechan para lanzar sus dardos contra el poder judicial, en la persona del “supremo” Servando Jordán, por “notable abandono de deberes” en el tema del Cabro Carrera, acusación constitucional que fue rechazada, pero de la cual “la pinturita” saca provecho para derrotar a Allamand en las senatoriales, marginándose éste temporalmente de la política.
Otro “complot” más reciente fue el que protagonizó Pía Guzmán (RN), quien acusó por pedofilia a importantes personeros UDI. El fuego cruzado parece no cesar y la Alianza no ha logrado mostrar unidad y es en este plano en el que reaparece Andrés con su idea de “Alianza Popular”, donde dice “trabajaré por una oposición que no se alineará con el empresariado, una oposición con un afán constructivo, pero teniendo una faceta alternativa y fiscalizadora del uso de los recursos públicos”.
NUEVA REGIÓN DE LOS RÍOS
El abanderado RN clarificó -en La Unión- que el rol de los partidos políticos no es velar por los intereses de los empresarios y que su trabajo de reformulación de la alianza apunta en otro sentido, estando su interés central de momento en el futuro de la X Región Norte, zona para la cual fue electo como senador.
“Me declaró partidario de la creación de una nueva región, pero esto debe ir más allá de una división geográfica, por tanto el proyecto que está en el Congreso debe ser mejorado.
Osorno debe resolver su posición y debe revisarse el tema de Panguipulli como otra nueva provincia, lo que no está considerado actualmente”, recalcó el parlamentario, entregándose así la posibilidad de un posible mapa triangular, con la creación de una tercera provincia para la Nueva Región.
Allamand apuntó: “lo que necesitamos es que la autoridad señale exactamente y dé a conocer a la ciudadanía cuál es el itinerario concreto de los estudios técnicos y de factibilidad para la región. La autoridad se maneja en estos temas con una nebulosa porque no ha fijado prioridades claras. No tiene sentido seguir hablando de corredores bi-oceánicos sin un itinerario claro”.
Lo anterior apuntando a temas concretos como son la promesa de un puente nuevo para la comuna de Río Bueno y el prometido puerto para Corral, donde ya aparece gente osornina con intereses en que el megaproyecto se realice en la zona de Bahía Mansa o Pucatrihue. Pero como dice el senador: “me parece bien lo que está haciendo el senador Frei, pero del tema Puerto Corral se debe estar hablando por lo menos 20 a 25 años y lo único que sé es que, tras 16 años de gobierno de la Concertación, no hay ningún estudio técnico que esté ni siquiera en carpeta para lo que se necesita hacer en Corral. Aquí ha habido años y años de palabrería pero nada concreto”.
Frente al tema que nada gusta a los valdivianos y que habla de una posibilidad real de La Unión como capital de la Nueva Región de los Ríos -tal lo ha expresado El Ciudadano en ediciones anteriores- el senador RN dijo: “La Unión tiene muchas ventajas, hay personas que han escrito y se ha planteado que -en el evento de una nueva región-desde el punto de vista técnico, la nueva capital debería estar en La Unión, y han hecho valer un conjunto de argumentos en tal sentido. No quiero opinar sobre si esta alternativa es la más válida, esto deben resolverlo los estudios y las comisiones encargadas”.
A fin de cuentas, Allamand aparece para realizar un nuevo intento de unificar a la fraccionada Alianza, la que sin embargo para el 2010 seguirá con su idea de llevar dos candidatos a las primarias. El “crespo” tiene planes para la Nueva Región pero nadie sabe del juego extra político nacional que se pueda avecinar. Esperemos que la experiencia adquirida le permita estar atento a los movimientos del juego de sus “compañeritos” de equipo: la Alianza Popular.