Otro cuestionado enroque entre funcionarios de gobierno y empresarios salmoneros se originó esta semana en la Región de Aysén, al asumir como direcctor de la patronal SalmonChile Hernan Rebolledo Fernandez, quién hasta hace unos meses era el representante de la Subsecretaría de Pesca en esa Región.
Rebolledo se va a trabajar donde los salmoneros con información privilegiada de lo que ocurre al interior del Estado y con todos los contactos que logro realizar durante su paso como funcionario fiscal.
Menos de un año alcanzó a estar Hernán Rebolledo como director zonal de pesca y acuicultura en Aysén, antes de renunciar, para pasar al sector privado, representando a quienes con anterioridad le correspondió regular y controlar.
Esta no es una situación inédita en el ministerio de economía, subsecretaría de pesca y acuicultura, y el servicio nacional de pesca, donde diversos funcionarios gubernamentales han pasado a trabajar para la industria salmonera. También lo es el hecho que abogadas de la industria pesquera, han migrado para ocupar cargos claves en la Subpesca, para luego retornar al sector privado.
Uno de los casos mas emblemáticos lo constituye el ex-subsecretario de pesca y acuicultura Felipe Sandoval, quien actualmente es el presidente de la empresarial Salmón Chile.
Para Ecocéanos, esta situación de promiscuidad burocrática-empresarial “explica situaciones como la reciente aprobación de 41 nuevas áreas para la expansión de los monocultivos industriales de salmón en la Reserva Nacional de Las Guaitecas, la mas antigua de Chile,por parte de los representantes de la industria salmoneras y funcionarios gubernamentales que integran la Comisión Regional del Borde Costero (CRUBC), entre ellos la seremi de Medio Ambiente y los directores de Sernatur y Conaf.
Rebolledo Fernández será reemplazado por la bióloga marina de la Universidad de Concepción Sonia Medrano Correa. La profesional había dirigido anteriormente proyectos de investigación en la Universidad Arturo Prat, Fundación Chinquihue, el Instituto de Fomento Pesquero (IFOP) y la Fundación Bordemar.