Ante la ausencia de servicios médicos que ingresen en los barrios, los vecinos de la villa 31 ubicada en el barrio de Retiro, Ciudad de Buenos Aires, decidieron agruparse y crear su propio servicio de emergencias para cuestiones de salud. Con la ausencia de ambulancias por parte del Estado, aparece esta opción autogestiva que intenta frenar el déficit sanitario con el que cuentan en el barrio.
Gilda Casalino cubrió el fenómeno para Anccom y habló con distintos actores del barrio. “La situación es que en las villas de la ciudad de Buenos Aires hay pocos centros de salud que no dan abasto, no ingresan las ambulancias con el tiempo necesario para que no se mueran nuestros vecinos. Y lo mismo pasa con los bomberos voluntarios, entonces ingresa la Policía Federal con todo lo que esto conlleva”, declaró Marina Joski, referente de la recientemente inaugurada Central de Emergencias Villera.
La iniciativa nació debido a que el Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME), servicio de salud que brinda atención gratuita de urgencias en la Ciudad de Buenos Aires, se niega a entrar a las villas si no es custodiada por un patrullero. Así, la Corriente Villera Independiente decidió crear un paliativo: crear sus propias ambulancias para cubrir los casos de gravedad que no pueden esperar a las demoras que el SAME suele tener, si es que decide concurrir.
Enterate más de este caso excepcional con la nota de Gilda Casalino hecha para Anncom
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