15 tipos de caña que todos hemos pasado

Evidentemente, esto se empezó a escribir un día en el que alguien trataba de volver a la vida prometiéndose no volver a beber. JA JA JA. Aunque no consigamos acostumbrarnos a ella, la resaca forma parte inseparable de nuestra vida y todos hemos pasado por alguna de estas situaciones.

1. La de no vuelvo a beber.

Es la clásica resaca culpable. El día anterior te la has cogido tan gorda que te sientes fatal contigo mismo (física y mentalmente), así que crees que necesitas una solución radical en tu vida para no sentirte tan miserable nunca más. Sabes que es mentira, pero te ayuda a pasar el domingo con un objetivo.

2. La ansiosa por noticias

No sabes qué pasó ayer. Intuyes que algo hiciste, que insultaste a alguien, que le tiraste los trastos al novio de una amiga, que hiciste una exhibición de tus bailes más ridículos o que vomitaste en los zapatos del chico que te gusta. ¡Por favor!! ¡Que alguien conteste ya a tus whatsapps!!

3. La de dónde estoy y quién eres.

Di hola, recoge tus cuchillos y vete tus cosas y huye. Es la versión más extrema de la ansiosa por noticias, aunque igual en este caso, prefieres no saber qué has hecho la noche anterior.

4. La zombie.

Llevas de fiesta desde el jueves y es sábado a las 6 de la mañana. No tienes resaca, eres un zombie. ¿Mañana? Lo seguirás curando con alcohol, porque es lo que mejor quita la resaca y continuarás en bucle zombie.

5. La de no me sube la bebida.

En Pamplona lo llamamos ‘síndrome 10 de julio’: llevas tantos días de fiesta que tu cuerpo lo ha asimilado. No eres un zombie porque no consigues que te suba el alcohol, sales por inercia y sufres por tu cuerpo, pero no te puedes ir a casa porque tienes que seguir de fiesta y vives en un continuo estado de ansiedad.

6. La rescaca.

Pues eso. Ese día que tú y el W.C os convertís en inseparables. Suele ir ligada a cantidades ingentes de kalimotxo el día anterior.

7. La de tengo comida familiar

La peor de todas, por mínima que sea tu resaca, los gritos de tus sobrinos, las preguntas de tu madre, las miradas asesinas de tu padre, las chorradas de tu cuñaó y las cantidades ingentes de comida no pro-resaca (pasta-pizza) harán que te quieras rajar las venas en cuanto te sientes a comer.

8. La de moño-pijama-comida basura

Sales de la cama, te plantas un moño y al sofá. Atracón de realities, y llamadas varias al restaurante chino y a la pizza, así hasta la hora de dormir, que suele ser bastante más tarde de lo que deberías. Es casi un estilo de vida.

9. La activa.

“Venga, vamos a la calle, que es la mejor manera de que se nos pase”. Te arreglas, te tomas dos ibuprofenos, coges las gafas de sol y venga a dar un paseo. ¡Sí! ¡La resaca no puede conmigo! Una hora después, caes al suelo.

10.  La de la negación. 

“Si ayer no bebí tanto” ,“habrá sido la cena”. Ya y los cuatro cubatas que te tomaste en el último bar no cuentan ¿no?. Ni las nosecuantas cervecitas de antes de la cena. Ná, no es para tanto, no.

11.  La de yo ya no estoy para estos trotes

Si te has bebido un cubata y al día siguiente te quieres morir, efectivamente, ya no estás para mucha marcha. Y te pasas el domingo recordando tus años mozos de media botella de Beefeater , kalimotxo caliente, doscientos chupitos de tequila….

     12. La de levantarse borracha.

O has dormido poco o has bebido tanto que al día siguiente no es que tengas resaca, es que estás pedo todavía. Todo te parece más gracioso, te chocas con las paredes, sigues oliendo a alcohol pero luego con una ducha se te baja y … hasta luego pedo, hola miniresaca.

13. La de entresemana

Y encima luego vas a trabajar. Es la más desgraciada de todas porque tienes que disimular. Te estás muriendo por dentro, tienes que ir al baño cada dos por tres y encima tienes que ponerle buena cara a tu jefe. Si te mola salir entre semana, búscate un compi de farra en el trabajo, así al menos, mal de muchos….

      14. La llorona

Si juntas factores como el no vuelvo a beber, qué hice ayer, me han robado el móvil, odio a todo el mundo/todo el mundo me odia a mí y un graaaaaan dolor de cabeza, ya tienes una maravillosa resaca llorona. Solo se consuela comiendo comida basura. Que al rato te dará más ganas de llorar.

      15 . La no resaca

Tienes menos de 18 años y ya verás lo que te espera dentro de unos años. (Te odio).

Vía: http://weloversize.com/