Las minorías sexuales se instalaron con carteles, megáfonos y banderas en el frontis de la Universidad Católica Silva Henríquez, donde Tarcisio Bertone dio una charla. La protesta contó con los respaldos y aplausos instantáneos de estudiantes y académicos. Bertone entró por un estacionamiento, para evitar encontrarse con los activistas del Movilh.
Activistas lesbianas, gays, bisexuales y transexuales del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) protestaron hoy contra el secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, momentos antes de que el religioso diera una conferencia en la Universidad Católica Silva Henríquez (UCSH).
Los activistas se presentaron en el lugar con pancartas donde repudiaron al Vaticano luego de que Bertone señalara ayer a la prensa chilena que la pedofilia no tiene relación con el celibato, pero sí con la homosexualidad.
“Bertone, los homosexuales no somos pedófilos, los curas que abusan de niños sí”, “El Vaticano daña la dignidad de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales” y “La Iglesia Católica debe asumir su responsabilidad en los casos de pedofilia” fueron algunas de las frases que se pudo leer en las pancartas desplegadas por los activistas en el frontis la USCH, donde había asistido el secretario de Estado del Vaticano a encuentro con el mundo salesiano.
“Repudiamos enérgicamente y con toda claridad las criminales declaraciones de Bertone que han sido rechazada por la mayoría de los chilenos y chilenas. Este personaje sólo difunde el odio y de manera pacífica hemos venido a responder a su violencia”, señaló el presidente del Movilh, Rolando Jiménez.
Durante la manifestación de hoy, el Movilh obtuvo el respaldo de decenas de estudiantes y académicos que aplaudieron la protesta y luego invitaron a los activistas de la diversidad sexual a ingresar a la USCH, en uno de cuyos patios expresaron su repudio a Bertone, obteniendo instantáneos aplausos de los alumnas y alumnos.
“Nos hemos dado cuenta de que la mayoría de los chilenos y chilenas ha rechazado los dichos de Bertone, así como también la comunidad internacional. Claramente Bertone es una persona non grata en nuestro país”, añadió Jiménez.
Bertone, quien hoy entró por el estacionamiento de la USCH para evitar encontrarse con los activistas, había señalado ayer que “han demostrado muchos sicólogos, muchos siquiatras, que no hay relación entre celibato y pedofilia, pero muchos otros han demostrado, y me han dicho recientemente, que hay relación entre homosexualidad y pedofilia. Esto es verdad, este es el problema”.
Tras conocerse la polémica declaración, esta obtuvo el repudio inmediato de las lesbianas, gays, bisexuales y transexuales organizados en el Movilh, quienes acusaron que “la Jerarquía de la Iglesia Católica es, y conviene decirlo con todas sus letras, en buena parte responsable de los severos trastornos psicológicos padecidos por jóvenes que van descubriendo una orientación sexual homosexual o una identidad de género transexual. Dichos trastornos son originados por la discriminación, por la burla, y por el estigma y ahora también por el aprovechamiento político mundial que la Iglesia protagoniza con sus homofóbicos dichos para ocultar sus brutales crímenes”.
El organismo de minorías sexuales añadió que “Bertone miente de una manera descarada e inhumana cuando sostiene que hay estudios demostrativos de que hay relación entre homosexualidad y pedofilia. Miente, por cuanto no hay ninguna investigación científica, seria e independiente de toda corriente religiosa que indique ello. Sus dichos son descarados por cuanto pretende responsabilizar a personas con una orientación sexual diversa, con los brutales casos de pedofilia cometidos por sacerdotes, utilizando de manera inmoral a los homosexuales como chivos expiatorios”.
“No aceptamos ni permitimos que la homosexualidad sea asociada a delitos de ninguna naturaleza. Nuestra sociedad mucho ha avanzado en comprender cada vez mejor ello, por tanto repudiamos que Bertone pretenda llevar a la ciudadanía a los momentos más oscuros de nuestra historia mundial, como lo es por ejemplo la Inquisición, potenciando el odio contra la diferencia”, señaló el colectivo.
El Movilh puntualizó que “con la voz de Bertone, la Jerarquía de la Iglesia Católica ahora no sólo es acusada con fundamentos de ocultar a los sacerdotes responsables de abusos contra menores. También puede ser acusada, con una claridad absoluta, de ser una institución doblemente criminal, por cuanto ofende ahora a un grupo de personas por amar a otras de su mismo sexo, sin importar el daño que ello causa en millones de seres humanos, en especial en aquellos jóvenes que están recién comprendiendo y asumiendo su orientación sexual”.
Movilh
El Ciudadano