Hace unos días la Fundación por la Memoria de San Antonio se enteró de que un mural que pintaron el pasado 29 de agosto sería borrado próximamente por orden de la Municipalidad de esa ciudad.
La obra, que está ubicada en la calle Curicó, casi al llegar a Barros Luco en Barrancas, tiene como motivo conmemorar lo ocurrido en las antiguas cabañas de veraneo de San Domingo, convertidas en un centro de prisión política, tortura y desaparición durante la dictadura cívico-militar. En total son 4 cuadros que representan las cuatro etapas por las que pasó el recinto.
Hablamos con el alcalde de San Antonio respecto a la posibilidad de que la obra sea borrada por orden municipal. Omar Vera (PRSD) plantea, primero que todo, que el uso del muro en cuestión es facultad de la administración municipal y que nadie les avisó de que allí se realizaría el mencionado dibujo.
Sin embargo, Vera reconoce que el problema radica también en el contenido del mural. «Es muy violento en términos de familia», dice el alcalde, aludiendo principalmente a una de las cuatro imágenes en donde se ve a dos soldados apuntando a un grupo de mujeres semidesnudas y con la cara tapada, una de las cuales está embarazada. «Es un mensaje muy duro para una niña o un niño», agrega el edil, argumentando que este va en contra del mensaje pro-vida que quiere propiciar la municipalidad.
Junto con ello, Omar Vera plantea la posibilidad de «suavizar esa imagen» para no tener que borrar el mural.
Por Daniel Labbé Yáñez