En la prensa de hoy -miércoles 27 de abril- aparece ampliamente difundida una declaración que el ministro del Interior Rodrigo Hinzpeter (en la foto), realizó en un programa de TVN. Al escucharla y leerla me surge risa y pena. Risa porque se trata de un chiste de humor negro; y pena, porque no podemos estar gobernados por corazones e inteligencias de este tipo. Bueno, Los chilenos ya eligieron y es lo que hay. Las palabras del Ministro son las siguientes “Yo decidí este invierno no prender la calefacción en mi casa, voy a pasar frío porque me quiero acordar todos los días, porque esa es mi obligación, de los chilenos que lo están pasando mal y todos los días me levanto pensando en cómo voy a ayudarlos… lo que puede esperar la gente es que va a tener un Gobierno, un Ministro del Interior, que va a estar al lado de ellos todo el invierno”.
Señor Ministro:
Le escribo para comentarle que su comentario no sólo me parece para la risa y penoso, sino también estúpido y egoísta. Para la risa, porque es de un humor negro que muchos envidiarían. Penoso, porque Chile merece autoridades con mayor estatura moral e intelectual. Es mi opinión; del mismo modo como lo fue la del 52% de electores que eligió a su jefe. No cree, usted, que para eso está la democracia. A propósito, ¿qué hacia usted por esos chilenos que tanto quiere “ayudar” cuando esos mismos compatriotas salían a luchar a la calle arriesgando sus vidas para recuperar la democracia –que, además, usted hoy disfruta? Bueno, eso ya es otro tema.
Lo que quería sugerirle, es que si en su casa decidió “pasar frío” debió preguntarle a su familia (esposa e hijos) si ellos estaban de acuerdo con tanta solidaridad. Ellos, ¿están dispuesto a pasar frío? ¿Les preguntó?
Además, quisiera recomendarle que si quiere gestos solidarios hacia millones de ciudadanos que lo pasan mal y no olvidarse de ellos –como usted mismo lo menciona- me gustaría proponerle que además de pasar frío de manera voluntaria:
- Se cambie de su Isapre a Fonasa,
- Que sus hijos se cambien de su colegio particular a uno municipal… en realidad, no sé, si tiene hijos, pero, eso ya no importa, tendrá sobrinos y/o familiares,
- Que sus ingresos los reduzca a la mitad o menos… sería bueno que viviera –para no olvidarse de la mayoría de los chilenos- con el mínimo, a lo menos, por unos meses,
- También, podría cambiar su lugar de veraneo,
- Podría cambiar de amistades y juntarse son los postergados del orden de privilegio que usted defiende,
- O en vez de comprar en el mall o en el supermercado, lo hiciera en la feria o en los persas que inundan nuestra ciudad.
- También, podría dejar el auto y comenzar a viajar en metro o micro –transporte público algunos le llaman-
- Incluso, podría dejar de comer algunos días para que el recuerdo del hambre no haga que se olvide de sus compatriotas,
- Renunciar a su trabajo y comenzar a mandar curriculum,
En realidad, no conozco a nadie que quiera pasar frío por ser solidario y vencer el olvido. Algo similar ocurrió con el actual ministro Lavín cuando como candidato presidencial se fue a dormir a las poblaciones. Señor Ministro, le propongo dejar el egoísmo y la estupidez.
Por Alejandro González Llaguno
Fotografía: emol.com