Gratuidad 2016: Rechazo absoluto al financiamiento vía becas

 Foto: Pascuala Nuñez, Iñaki Martinez, Nicolás Fernandez, Valentina Saavedra y Diego Martínez

El proyecto de gratuidad en la educación superior que comenzará a regir este 2016 está siendo bastante criticada por los movimientos sociales que plantean que la gratuidad debe ser a través de fondos basales y no por becas, como se ha anunciado hace unos días.

Los estudiantes afirman que no es hora de que el Gobierno les vea la cara, porque es necesario recordar que no sólo los alumnos juzgan la medida, sino que gran parte del Consejo de Rectores (CRUCh),  apuntan a que la fórmula sería una beca encubierta y que la aplicación del mismo proyecto no alcanzaría para cubrir los gastos de una carrera.

El vocero de las privadas dentro del CONFECh, Nicolás Fernández,  conversó con El Ciudadano y señaló que el debate tiene dos posturas, la que mantienen los movimientos sociales en torno a los aportes basales y el que sostienen organismos políticos de derecha como la Democracia Cristiana en relación a la asignación de becas para desarrollar el proyecto.

Fernández manifestó que el Gobierno debe tomar una postura, es decir, o escuchar a los movimientos sociales o a los movimientos conservadores, pero que «no puede estar a medias tintas”.

En la misma línea, nos dijo que si hoy no existe una transformación en la educación, la gratuidad no va a significar, en ningún caso, un derecho social. Porque si realmente no hay un movimiento en la democracia o en el marco regulatorio a exigir, el proyecto no se validará como debiese. Además, añadió que el cambio en la fecha de la movilización se debió a que esperan ser escuchados en las mesas legislativas próximas a realizarse.

Finalmente, al conversar sobre las expectativas ante los detalles que entregará mañana la Presidenta en torno a la Ley de Financiamiento, sostuvo que el mayor objetivo es que los montos vayan en aporte a una educación pública, “independiente que sean universidades estatales o privadas, el proyecto debe responder a la pertinencia y necesidades de nuestra sociedad”, es decir, que los recursos vengan acompañados de criterios claros, donde no se financie cualquier institución, sino que existan normas claras que aseguren un correcto desarrollo social.