Las personas refugiadas y migrantes que llegan a Serbia necesitan ayuda urgente ante la llegada del invierno

El trabajo de Oxfam se centrará en Šid, cerca de la frontera con Croacia, Dimitrovgrad, en la frontera búlgara, y Preševo/Miratovac, próximo a la frontera con Macedonia. (c) Sam Tarling / Oxfam

Desde el inicio de 2015, más de 500.000[1] personas han intentado llegar a Europa y casi el 75% (387.000 personas hasta septiembre) lo hacen a través de la ruta de los Balcanes, cruzando los países del Este, sobre todo Grecia, Macedonia y Serbia. La crisis en Siria y la inestabilidad en la región hacen pensar que el número de recién llegados seguirá en aumento.

Las personas refugiadas y migrantes que realizan este recorrido lo hacen en condiciones muy precarias, muchas veces durmiendo al aire libre y sin recursos para aguantar el invierno que está por llegar. El 25% son menores.

Respuesta humanitaria de Oxfam

En este contexto, Oxfam (Oxfam Intermón en España) ha decidido empezar un programa de respuesta humanitaria en Serbia – con un objetivo de financiación de un millón de euros – para ayudar a las miles de personas, muchas de ellas sirias, que huyen en busca de seguridad. Oxfam trabaja en nueve de los 10 principales países de origen de los refugiados en todo el mundo, así como en países fronterizos con Siria, como Líbano y Jordania.

Oxfam va a distribuir materiales para ayudar a aquellos que han logrado llegar a Serbia a afrontar el invierno. Su trabajo se centrará en Šid, cerca de la frontera con Croacia, Dimitrovgrad, en la frontera búlgara, y Preševo/Miratovac, próximo a la frontera con Macedonia.

Según el coordinador humanitario de Oxfam en Serbia, Riccardo Sansone, “la gente está llegando exhausta, hambrienta y sedienta, y muchas veces necesita atención médica urgente. Están traumatizados y a menudo han sido objeto de abusos por parte de los traficantes y las redes de contrabando de personas. Las instalaciones de agua y saneamiento son insuficientes a lo largo de la totalidad de las rutas de migración, porque Serbia no esperaba tal cantidad de personas”.

Oxfam está construyendo puntos de agua, letrinas y duchas. Además, reparte kits de higiene, mantas y plásticos para protegerse de las frías temperaturas que están por llegar. Paralelamente, ofrece información y apoyo legal para que las personas refugiadas y migrantes conozcan las leyes locales y los riesgos que pueden encontrarse en su viaje, como las mafias y los traficantes de personas.

Sansone ha reconocido los esfuerzos realizados por el Gobierno serbio para afrontar la situación, destacando que esos esfuerzos deben de ser acrecentados y apoyados. Serbia ha pedido asistencia internacional. Los refugiados afrontan la perspectiva de un invierno extremadamente frío. “Las familias con niños pequeños están durmiendo al aire libre en parques, estaciones de tren y autobús o en los bosques cercanos a los puntos de cruce. Están muy expuestos al riesgo de robos, violencia sexual y otros abusos”,  añade Sansone.

La responsabilidad de la UE

Oxfam Intermón ha pedido a la UE en numerosas ocasiones que se pongan en marcha medidas necesarias para asegurar que los países miembros cumplen con sus obligaciones respetando en todas las situaciones los derechos humanos de las personas migrantes.

“Europa no está sumida en una crisis migratoria, sino en una crisis de voluntad política. Está claro que cuenta con la capacidad y los recursos necesarios para acoger a todas las personas que llegan a sus fronteras. Por ello es imperativo que la UE ponga en marcha de manera urgente medidas para proteger a los migrantes y darles la asistencia adecuada,  asegurando un tránsito seguro” ha dicho Jaime Atienza, responsable de Campañas y Estudios de Oxfam Intermón

Además, la UE debe comprometerse a nivel político y económico con las causas de esta migración forzosa. Eso pasa porque los distintos países miembros empujen soluciones políticas a los conflictos y redoblen esfuerzos en la lucha contra la pobreza, la desigualdad y el cambio climático

Importante rol de España

Oxfam Intermón pide al Gobierno español y a todos los grupos de la oposición que aumenten el presupuesto de ayuda humanitaria en 100 millones de euros para paliar las necesidades de quienes sufren las consecuencias de conflictos como Siria pero también otros más olvidados como República Centroafricana, Burundi o Yemen.

Además, España, dentro de la Unión Europea, debe asegurar unas condiciones adecuadas de acogida para los 15.000 refugiados aceptados por el Gobierno e instar a otros países que hagan lo mismo.Es importante que esta cifra se revise y adapte según el número de refugiados que lleguen así cómo el presupuesto comprometido.

En su asiento dentro del Consejo de Seguridad, España debe poner todos sus esfuerzos diplomáticos en la resolución de conflictos como el de Siria ya que sin paz la gente no dejará de huir de sus países. “Es inaceptable que la comunidad internacional no actúe para poner fin a la violencia en Siria, especialmente cuando la guerra se intensifica”, concluye Atienza, citando el informe Solidaridad con Siria, publicado hoy por Oxfam, que analiza la actuación de los países ricos y poderosos respecto a conflicto sirio.

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