El conjunto que completó el podio en el Mundial de Brasil 2014 la pasó mal en estas Eliminatorias. Necesitaba un milagro para conseguir un lugar en la repesca, pero tuvo un día para el olvido y le salió todo al revés.
Nada es imposible en el fútbol. Mucho se dice de los pergaminos, pero los que juegan son los once. Y no siempre gana el más fuerte. Después de 32 años animando el certamen, la exnaranja mecánica no logró obtener el pase para la Eurocopa de Francia 2016 al caer 3 a 2 ante República Checa como local. Pero de nada hubiese servido una victoria, ya que Turquía, su rival directo por el repechaje en el Grupo A, venció 1 a 0 a Islandia y, como mejor tercero, de yapa accedió de forma directa al torneo.
El insólito gol en contra de Van Persie hundió aún más a los holandeses en el bochorno. El delantero aseguró que continuará en la Selección pese al mal momento. «Rendirse para mí no es una opción, mi corazón llora como un futbolista. Fue una eliminatoria terrible, pero tenemos que seguir siendo positivos. Hay que revertir lo que pasó».
Holanda no fue capaz de superar una fase de clasificación en la que tres equipos de su grupo se metieron directamente (República Checa, Islandia y Turquía). Cinco derrotas en diez partidos y sólo un punto de 18 posibles en los enfrentamientos ante las selecciones que le precedieron en la tabla reflejan un fracaso impropio de un país con tanto talento.
Los medios fueron muy duros por cómo se manejó el equipo, con cambio de técnico (Blind por Hiddink) incluido. “Oh, Oh, Oranje”, tituló De Telegraaf. “El fútbol holandés se ha derrumbado y se han desenmascarado sus miserias más absolutas. No hay palabras para definir esto”, definió su editor de deportes.
La marcha de Van Gaal al United descabezó una selección que con él había ido tapando huecos. Louis cambió el histórico 4-3-3 en la cita brasileña y pasó a jugar con tres centrales y dos carrileros. A Van Gaal se le criticó por aquello, pero los resultados demostraron que sabía perfectamente lo que hacía.
Otro detalle ha marcado también el fracaso rumbo a la Eurocopa. La brillante generación de Van der Vaart, Van Persie y Sneijder se ha agotado y el único de sus supervivientes, Robben, está lesionado. Los jóvenes, especialmente la nueva estrella Depay, no han sido capaces de enderezar el barco.
Aficionados y entrenadores piden ahora una revolución total. No parece que se produzca en el banquillo, porque el fracaso no se considera exclusivamente de Blind. Para colmo, el rival de siempre Bélgica clasificó primero y ahora lidera el ránking mundial de Selecciones. Tiempos duros.