El erotismo según un maniaco sensual sentimental

La fotografía puede crear universos instantáneos; la imagen que se captura representa un espacio en el tiempo congelado para siempre, pero también el resto del mundo está retratado, simplemente no es visible ante nuestros ojos

El erotismo según un maniaco sensual sentimental

Autor: Andrea Peña

La fotografía puede crear universos instantáneos; la imagen que se captura representa un espacio en el tiempo congelado para siempre, pero también el resto del mundo está retratado, simplemente no es visible ante nuestros ojos. Las fotografías de Jean François Jonvelle tienen una particularidad: él captura el mundo entero en la fotografía.

Jean Fraçois Jonvelle11

Jean François Jonvelle nació en Cavaillon, Francia en 1943. No asistió a ninguna escuela prestigiosa del país, sólo tomó una cámara y fotografió a sus primeras musas: su madre, su hermana y su abuela. “Mis primeras víctimas”, las llamó. También aprendió sobre encuadres y fotografía gracias a algunos de los mejores maestros: Mankiewicz, Lubitsch, Fritz Lang, Orson Welles, Arthir Penn, Alfred Hitchcock e incluso Terry Gilliam fueron quienes le dieron la inspiración y de quienes tomó algo para moldear su propio estilo.

Jean Fraçois Jonvelle19

Jean Fraçois Jonvelle12

A los 20 años se convirtió en el asistente de fotografía del genio Richard Avedon. Trabajaba para importantes revistas como Elle o Marie Claire, pero nunca dejó de fotografiar su pasión: las mujeres. Poco a poco se consolidó como uno de los más importantes fotógrafos de Francia, hasta que tuvo la libertad de dedicarse únicamente a ese tipo de imágenes que siempre lo acompañaron.

Jean Fraçois Jonvelle14

Jean Fraçois Jonvelle6

“Un maniaco sexual sentimental; un voyerista de nacimiento”, palabras con las que se describió el fotógrafo.

“Cuando fotografío a una mujer, quiero que sepa que es la más bella del mundo, porque una mujer que se siente bella, es ciertamente la más hermosa del mundo. Mi felicidad está también en no haber coartado jamás mi libertad, ni haber perdido la frescura, mi instante…”

Jean Fraçois Jonvelle8 Jean Fraçois Jonvelle7

La fotografía en blanco y negro muchas veces es parte de un juego del que se ha abusado para lograr imágenes más “bellas” o “estéticas”, pero el trabajo del fotógrafo muestra una realidad alterna en la que sólo existe la mujer de retratada, por eso se dice que ella crea un mundo propio. Ella se convierte en un ser en blanco y negro, en composición y contraste.

Jean Fraçois Jonvelle2

La sexualidad emana siguiendo cada línea, mostrando esas partes del cuerpo que usualmente se esconden a la luz del día, cuerpos en situaciones habituales, mostrando abierta, pero elegantemente, eso que se convierte en el deseo de muchos. Secretos en la imagen, las sombras cubren partes del cuerpo que usualmente no son eróticas, pero al guardarse se convierten en un nuevo fetiche; muslos, brazos y más llaman la atención por su ausencia.

Jean Fraçois Jonvelle21 Jean Fraçois Jonvelle52
Incluso en las imágenes donde el desnudo no es parte de la fotografía, la ropa adquiere un nuevo sentido que despierta los sentidos. Cayendo en sutiles partes del cuerpo, o mostrando justo lo necesario para despertar la imaginación. La fotografía erótica siempre tiene algo nuevo que descubrir, pero superar a Jean François Jonvelle es un verdadero reto. Esa capacidad del ser humano por despertar el placer a través de la vista, de metaforizar el cuerpo y encontrar mil significados que la luz, la postura e incluso el contexto pueden cambiar.

 

Fuente: Cultura Colectiva-


Reels

Ver Más »
Busca en El Ciudadano