Siguen encontrando cancerígenos: entre otros, papas fritas y tostadas

Un informe sobre los riesgos causados por altos niveles de acrilamida, fue publicado por la Agencia de Normas Alimentarias del Reino Unido (FSA, por sus iniciales en inglés), en su página web.

La acrilamida es una sustancia química que se forma en algunos alimentos durante los procesos de cocción a temperaturas superiores a 120ºC y aparece en papas fritas caseras, precocinadas, aperitivos de bolsa (frituras o snacks) y en el pan tostado. Según los científicos encargados de este estudio, la acrilamida, en altos niveles, causa cáncer.

Esta toxina química se produce naturalmente por la reacción entre aminoácidos, azúcares y agua que se forma en productos durante los procesos de cocción a temperaturas superiores a 120ºC.

Los estudios prueban que mientras más oscura sea la fritura y más crujiente la textura de su capa, mayor será el nivel de acrilamida. El profesor Guy Poppy, jefe asesor de la FSA, señala al diario The Telegraph: «Desde luego no aconsejamos a la gente dejar de comer estos alimentos, aunque freír las papas en casa sería mejor siempre hasta un color dorado claro de la capa. Y el pan debería ser tostado hasta el color más claro aceptable».

Estos son algunos de los consejos que podrían ayudar a reducir el riesgo:

–Es necesario hervir ligeramente las papas antes de freírlas, un mejor método para hacer las capas crujientes, porque el proceso reduce los azúcares libres que generan las acrilamidas.
–Almacenar las papas fuera del refrigerador, porque las bajas temperaturas pueden aumentar la cantidad de azúcares presentes en las papas.
–No se deberían ahuecar las papas sancochadas antes de asar porque, al hacerlo, se aumentan en tamaño, lo que a su vez aumenta los niveles de acrilamida.

Fuente: RT