Paul Joannides, autor de Guide to getting it on (Guía para montárselo) asegura que en la cama todo depende del ángulo: «El ángulo de su erección y tu pelvis determinan exactamente los puntos clave que él estará tocando y la fuerza con la que lo hace». Y aquí es donde entran en acción los cojines ya que, según Joannides, «pueden ser un buen y eficaz ayudante en las posturas sexuales. Prueba a ponerlo debajo de su trasero mientras tú estás arriba o a apoyar el coxis sobre el cojín mientras practicáis el misionero. También, puedes sentarte o sentarle sobre él mientras uno de los dos está en una encimera (vuestra pasión no entiende de lugares)».
El experto nos invita a no tener miedo de experimentar con cojines de distintas dimensiones: «Te sorprenderás viendo cuántas sensaciones diferentes puedes alcanzar con, tan solo, añadir un cojín».
Te invitamos a que pruebes distintas posiciones: de lado, bocabajo, bocarriba, las piernas de lado, el cojín bajo tus caderas… Será fantástico, te lo aseguramos. Con el ángulo adecuado, tu placer será sublime. Otra opción es utilizar varios cojines a la vez. Por ejemplo, prueba a ponerte 2 o 3 bajo tu trasero, y que él se coloque entre tus piernas.
El truco es probar todas las opciones que un objeto tan sencillo y cotidiano puede ofrecerte. Diviértete y disfruta jugando con tu chico y los cojines a tu alrededor. Te deseamos una feliz noche de sexo salvaje.
Fuente: Cosmohispano