La noche del miércoles 25, en una votación abierta, el Senado aprobó por 59 votos a 13 que el senador del oficialista Partido de los Trabajadores, PT, Delcidio Amaral siga en prisión. Amaral fue detenido horas antes, bajo acusaciones de haber ofrecido dinero y una ruta de fuga a un ex director de Petrobras para que no hablara sobre su participación en un esquema de corrupción en la estatal. De buena relación con la presidenta Dilma Rousseff, el senador preso podría ser expulsado en breve del PT, mientras el Ejecutivo se despega del escándalo. Dilma no se manifestó respecto de las acusaciones que pesan contra el hasta ayer jefe del bloque parlamentario del PT: aseguró a sus ministros que la situación de Delcidio es “insustentable”.
“Incurriríamos en un pésimo ejemplo para el país si decretáramos un relajamiento de la prisión de Delcidio Amaral”, dijo la noche del miércoles (25) el senador socialdemócrata Aloysio Nunes, líder opositor en el Senado, durante la votación que confirmó el encarcelamiento del senador oficialista, acusado de haber amenazado a un ex director de Petrobras para que no revelara su participación en un esquema de corrupción en la estatal.
La noche del miércoles (25), en una votación abierta, el Senado aprobó por 59 votos a 13 que el senador del oficialista Partido de los Trabajadores, PT, Delcidio Amaral siga en prisión. Amaral había sido detenido horas antes, cuando trascendieron grabaciones en las cuales ofrecía dinero, rutas de escape e influencia política al ex directivo de Petrobras, Néstor Cerveró, para que no hablara sobre la participación del senador y del banquero Andre Esteves en el esquema de desvío de fondos públicos en Petrobras. Esteves también está detenido desde el miércoles.
Mientras partidos de oposición y de la base oficialista votaron contra la liberación de Delcidio, el poder Ejecutivo marcó distancia respecto a la noticia que conmociona al mundo político de Brasilia. La presidente Dilma Rousseff no se manifestó respecto de las acusaciones que pesan contra el hasta ayer jefe del bloque parlamentario del PT: aseguró a sus ministros que la situación de Delcidio es “insustentable”.
El ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, se declaró a favor de respetar el curso de las investigaciones de la Policía Federal y el Ministerio Público. “Me critican desde mi partido (PT) y de la oposición, porque cuando la investigación recae sobre alguien de la oposición me acusan de que soy funcional al partido, y cuando recae sobre algún oficialista me acusan de que no controlo (las acciones de la Justicia)”, dijo Cardozo.
También trascendió que la dirección del PT se reunirá la semana próxima para discutir la expulsión a Amaral del partido.
Fuente: brasil247
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