“Al perder tu propósito, has perdido el camino”
– Friedrich Nietzsche
¿Cuál es el propósito de la vida? Esta pregunta ha acompañado al hombre siempre, desde que nuestros antepasados se convirtieron en seres pensantes, esta pregunta ha sido el gran misterio no resuelto del hombre.
Los científicos lo han tomado como tema de investigación y los intelectuales como fuente de inspiración y delirio. Miles de novelas, ensayos y cuentos se han redactado en busca de la respuesta, terminando siempre en una borrosa conclusión, distinta a los ojos de quien la mira.
Para encontrar el propósito de nuestra vida y darle un giro si está yendo por una dirección que no debería, lo principal es conocernos, saber quiénes somos y qué queremos y así dibujar la dirección que seguiremos para cumplir ese propósito para llegar a ser felices. Una manera de empezar por este camino es haciéndonos las 7 preguntas que compartiremos a continuación, una guía para que te reencuentres contigo mismo y descubras cuál es tu propósito en la vida.
¿Cómo te puedes avergonzar a ti mismo?
La clave del éxito es la perseverancia y es inevitable que para poder conseguir el éxito, tenemos que fracasar algunas veces, todo ello en búsqueda de la perfección y de encontrar la fórmula perfecta para hacer las cosas.
La presión social se ha convertido en uno de los factores que pueden afectar nuestro desarrollo, muchos evitan intentar cosas nuevas por miedo al fracaso y al juicio de la sociedad, frenando así una etapa de crecimiento personal.
Avergüénzate a ti mismo, fracasa, no tengas miedo, cada fracaso es una experiencia que te acercará más a descubrir cómo ser mejor en lo que quieres.
¿Cómo salvarías al mundo?
Día tras día los diarios muestran en sus primeras planas crímenes o problemas que lastiman a la sociedad y el panorama parece volverse más gris conforme pasa el tiempo.
Si bien es cierto que no todos tenemos el poder y recursos para una solución inmediata, podemos iniciar con pequeñas acciones que generen un cambio en nosotros y quienes nos rodean.
¿Te preocupa el problema de corrupción que existe en el mundo? Entonces no des dinero al oficial de tránsito que te detiene después de pasarte el alto, ni des un regalo al profesor para que te ponga una nota positiva.
Estos pequeños cambios y el hecho de sentir que estás haciendo bien las cosas, te darán un sentimiento de satisfacción que con el tiempo puede convertirse en felicidad y el propósito que todos tenemos es ser felices ¿O no?
¿Qué aspecto de tu vida actual entristecería al niño que fuiste?
¿Recuerdas cómo eras de niño? ¿Qué metas tenías? ¿Cuál era tu pasatiempo favorito? ¿Qué querías ser de grande?
Con el tiempo crecemos y perdemos la magia y capacidad de asombro que teníamos cuando éramos pequeños, abandonamos los sueños casi inalcanzables por metas tangibles pero simples y dejamos de creer que podríamos ser astronautas.
Recuerda esa época y pregúntate ¿Qué aspecto de tu vida actual entristecería al niño que fuiste?
Si de niño te gustaba dibujar, compra un juego de lápices, un cuaderno blanco y comienza a hacer trazos, haz lo que ese niño hubiera querido que hicieras y, quien sabe, quizá te encuentras con tu verdadera vocación y un nuevo camino de vida.
¿Qué te hace olvidarlo todo?
Una historia cuenta que la mamá de Isaac Newton tenía que recordarle frecuentemente que fuera a comer, porque al trabajar el inventor perdía la noción de todo y se sumergía en el mundo de la creación.
El trabajo, la tarea para mañana, los videojuegos, hay muchas y muy diversas actividades que nos gustan o absorben de tal manera que nos hacen olvidarlo todo, incluso comer.
Si una actividad te gusta al grado de ponerle la máxima dedicación, podrás identificar en ello varias actitudes que puedes aplicar en otros aspectos de tu vida. Esa facilidad que tienes para tomar decisiones en los videojuegos, úsala para resolver los problemas de la escuela o trabajo y verás que tu vida se hará más fácil.
¿Qué sacrificio estás dispuesto a tolerar?
La vida implica sacrificio, nada llega gratis, en muchas ocasiones tenemos que sacrificar algo para que un aspecto de nuestra vida se vea favorecido, hay que mantener la balanza.
Sin embargo, no todos los sacrificios valen la pena y es ahí donde tienes que aprender cómo reconocerlos y preguntarte cuáles estás dispuesto a tolerar o resistir.
Si tienes una banda y quieres ser una súper estrella, tienes que estar preparado para sacrificar tiempo con tus seres queridos, invertirlo en el estudio de grabación y ser paciente a varios rechazos de disqueras.
El sacrificio y fracaso siempre estarán presentes en la vida, al menos una vez, aprende a lidiar con ello.
Si tuvieras que abandonar tu hogar ¿A dónde y qué harías?
Quizá no lo sepas, pero la rutina es algo muy común en nuestra vida e incluso algo que llegamos a disfrutar.
La rutina nos convierte en una especie de robots que no va más allá de su zona de confort, robots que no se detienen para observar el azul del cielo o para olfatear las rosas del jardín.
¿Y si alguien te obligara a abandonar tu hogar durante todo día? ¿A dónde irías? ¿Qué cosas nuevas harías o intentarías?
Descubre nuevas actividades, entra a clases de baile, conoce gente nueva en algún bar, escápate y visita un pueblo pintoresco el fin de semana. Abandona tu zona de confort y descubre los secretos que tiene el mundo para ti, en un viaje donde también te encontrarás a ti mismo.
¿Qué te gustaría hacer si supieras que vas a morir muy pronto? ¿Cómo quisieras ser recordado?
Hablar de la muerte es hablar de uno de los temas más incómodos de la vida y paradójicamente, lo único seguro de ella.
Imagina que por alguna razón te enteras que te queda un año de vida o menos, ¿Cuál dirías que fue tu mayor logro? ¿Cómo te gustaría ser recordado? ¿Qué te gustaría que la gente dijera de ti?
Si nunca te has hecho está pregunta significa que nunca te has puesto a pensar realmente qué ha sido y qué estás haciendo con tu vida.
Puede sonar básico, pero el hecho de preguntarnos ¿Cuál es el propósito de nuestra vida? Realmente puede ayudar a que cambie nuestra mentalidad y empecemos a buscar dicha razón, creando cambios en nosotros mismos para lograr metas y éxitos por los que podamos ser recordados después de abandonar esta tierra.
Fuente: Cultura Colectiva