Hay juguetes que prácticamente deberían ser prohibidos para el uso de los niños, ya que su mal manejo podría traer consecuencias fatales como la que te contaremos a continuación.
Este caso ocurrió en Australia, en donde un niño pequeño lastimó sus ojos con un juguete de fácil acceso que fue comprado por sus papás.
Se trata de un puntero láser, que sirve para apuntar objetos a distancia. A este chico se le hacía divertido apuntarlo hacia sus ojos y con los días fue perdiendo la vista gradualmente.
El niño de 14 años después de perder la visión, visitó a un especialista. Lo revisaron y se dieron cuenta de que la parte posterior de ambos ojos mostraban quemaduras leves, aunque dañinas para la vista. El chico no sentía dolor alguno, aunque solo podía ver al 25%.
Ahora que lo saben, no hagan mal uso del láser y eviten dárselo a los pequeños.