Unos 200 trabajadores del Hospital Garrahan se movilizaron ayer frente a la Legislatura porteña para resistir la disminución de la partida prevista para ese centro de salud en el Presupuesto 2016, que se votaba puertas adentro, pero no pudieron evitar el recorte de 348 millones de pesos propuesto por el Ejecutivo local. “Estamos peleando para que los chicos puedan seguir recibiendo una atención digna”, dijo Aldo Haimovich, coordinador de Terapia Intensiva del Hospital, antes de la votación.
“Hablamos con los legisladores de todos los partidos, pero lamentablemente el bloque PRO no ha mostrado ninguna intención de entender que este recorte es grave para el futuro de nuestro hospital”, sostuvo.
El profesional afirmó que “debido al recorte en 2015” no se pudo comprar “equipamiento que incluye respiradores, monitores, bombas de infusión, equipos de rayos y de laboratorio”, y adelantó que con el nuevo recorte “se van a agregar restricciones a algunas obras que están en marcha, como ampliar la cantidad de camas en el área de internación para los chicos con enfermedades respiratorias y para los niños con cáncer”.
“Hasta ahora no se han visto afectados los salarios”, aclaró Haimovich, aunque 2016 será el tercer año consecutivo que el Gobierno de la Ciudad no aporta la totalidad de lo que le corresponde por ley.
Desde su creación en 1989, el Garrahan depende de dos jurisdicciones, Nación y CABA, cada una debe aportar el 50 por ciento de un presupuesto elaborado por la dirección del hospital junto con la Comisión de Finanzas “en base al presupuesto del año anterior, la inflación y los proyectos anuales, y en este caso, también teniendo en cuenta las deudas anteriores que tiene la Ciudad”, explicó Soledad González, quien es residente del área de Infectología Pediátrica.
“Tanto este año como los anteriores, el gobierno nacional aportó sin ningún tipo de recorte. En este momento se está votando –en la Legislatura– el presupuesto 2016 con un 20 por ciento menos de lo que corresponde a Ciudad, es decir un 10 por ciento menos del total. El ítem que se ve afectado es concretamente el de Obras y Mantenimiento”, precisó.
El diputado José Cruz Campagnoli, de Nuevo Encuentro-FpV, sostuvo que “de la misma manera que sucedió en cinco de los ocho años de la gestión macrista, para 2016 el Gobierno de la Ciudad prevé incumplir con el compromiso con el Garrahan”.
“A los 550 millones que el Ejecutivo porteño le adeuda al hospital se le agregan 350 millones más por el recorte que propone el presupuesto del año que viene. Con este recorte, el PRO deja en claro cuál es su postura sobre el sistema de salud público”, añadió.
Por su parte, el legislador del Frente de Izquierda Marcelo Ramal consideró que el recorte para el 2016 es “particularmente grave”.