Es el arquero más goleador de la historia del fútbol y puso punto final a su brillante carrera. A los 42 años, el símbolo del Sao Paulo colgó los guantes y los botines. Y luego de su despedida quedarán en el recuerdo los 131 goles marcados en 1.237 partidos y sus 26 títulos: 22 con el su club y 4 con la selección de Brasil, entre los que se destaca el triunfo en el Mundial de Corea-Japón 2002.
Conocido por que cada vez que su equipo tenía una pelota parada cerca del área rival, el arquero cruzaba la mitad de la cancha y todo el estadio sentía olor a gol. Fueron 61 goles de tiros libres, 69 de penal y uno con pelota en movimiento.
Acá, un resumen de su exitosa carrera goleadora.