Un insignificante punto puede hacer una enorme diferencia

La puntuación ha sido siempre muy importante para crear una comunicación efectiva en el lenguaje escrito, pero desde que nos hemos acostumbrado a conversar por mensaje de texto (facebook, whatsapp, etc.) a través de internet, en estos registros de escritura no formal, el rol de la puntuación ha cambiado muchísimo –y hasta se ha vuelto innecesario. En un reciente estudio realizado por investigadores de la Universidad de Binghamton (NY), se ha llegado a la conclusión de que los receptores de mensajes de texto interpretan los mensajes de forma totalmente diferente, dependiendo del uso u omisión de una cosa tan sencilla como el punto (.).

En el estudio «Texting insincerely: The role of the period in text messaging» (algo así como ‘Mensajes poco sinceros: el rol del punto en los mensajes de texto’), participaron 126 estudiantes universitarios y fue conducido por el Centro de ciencias psicológicas y cognitivas de Binghamton. Los investigadores descubrieron que los mensajes terminados con un punto eran considerados «menos sinceros» que mensajes idénticos pero sin punto. Los participantes mantuvieron una serie de conversaciones breves, donde una pregunta era respondida con palabras afirmativas simples. En la mitad de los casos, la respuesta exacta a una invitación fue «Seguro.» (con punto) y en la otra mitad fue «Seguro» (sin punto). Sorpresivamente, esta sutil manipulación fue suficiente para hacer que los receptores del mensaje calificaran la respuesta sin punto como «más sincera» y la puntuada correctamente como «menos sincera».

Luego, para entender si efectivamente el punto tiene tal carga interpretativa, les mostraron a los participantes capturas de pantalla (screenshots) de conversaciones de texto por celular y otros mensajes escritos a mano. En el primer caso se mantuvo la idea de que los mensajes terminados en punto eran menos sinceros, mientras en el segundo, no importando si las frases finales eran puntuadas o no, todos se interpretaron como sinceros.

Por alguna razón, un punto no parece tener el mismo impacto en la escritura a mano que en mensajes de texto –una forma de comunicación mediada por computadoras (CMC).

Los investigadores aún no tienen claro por qué en este formato el punto tiene una carga connotativa tan diferente de los textos escritos a mano, pero en este estudio concluyen que «no se trata tanto de que el punto se use para dar a entender falta de sinceridad, sino de que la puntuación es una de las pistas, usadas por los emisores y entendidas por los receptores, para convenir información pragmática y social».

En la ausencia de paralenguaje –inflecciones vocales, expresion facial y corporal, pausas y contacto visual–, el que usamos en la conversación oral, un humilde y sencillo punto puede llegar a adquirir mucho más valor en los mensajes de texto. Hay muchos quienes ya creen en la importancia del protocolo en la correcta puntuación cuando se trata de chatear, como la convicción de que el punto connota una actitud pasivo-agresiva, la ausencia de un signo de exclamación constituye rudeza, que el punto suspensivo otorga gentileza (o duda, ironía, etc.)  o que sólo la gente mayor usa comas (?!). Pero finalmente es asunto de los involucrados en la conversación el ponerse de acuerdo -explícita o implícitamente- acerca de las normas de entendimiento al chatear.

Las reglas de conversación van variando de acuerdo al formato y la situación, y mientras la mensajería instantánea ya se ha hecho normal y cotidiana, ahí están los emoticones y emojis para humanizar los textos. Y por último, si se trata de arreglar malos entendidos, siempre está la posibilidad de despejar dudas con mas conversación y gestos, por texto o en persona.

CCV

Fuente: mental_floss