Nuevo dispositivo compacto detecta el cáncer cervicouterino en menos de dos minutos

En México, un equipo de investigadores del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM, campus Monterrey), desarrolló un dispositivo médico portátil para detectar tempranamente del cáncer cervicouterino, capaz de generar el diagnóstico en menos de dos minutos.

Este sistema, que es completamente portátil, se asemeja a la figura de una pistola más estilizada y fina, y puede ser manipulado fácilmente con una sola mano. Al contrario del Papanicolau, no requiere de pruebas de tejido que se analizan en laboratorio, sino que utiliza las tecnologías de medición óptica y eléctrica, reunidas en un solo sistema. De esta manera realiza el diagnóstico de manera instantánea y con un nivel de confiabilidad de 85%, mayor al 70 por ciento que aporta el método de citología vaginal.

De acuerdo con uno de los creadores, el doctor Jesús Seáñez de Villa, las características del dispositivo le permiten ser una opción viable para combatir este tipo de cáncer, que representa la tercera causa de muerte en mujeres a nivel mundial.

«Esta es una enfermedad que si se detecta en las primeras etapas, nueve de cada 10 mujeres se pueden incluso curar completamente. El método común de tamizaje es el Papanicolau,  pero en este proceso intervienen muchas manos, como el ginecólogo, laboratorista, citólogo, patólogo, etcétera. A eso se le suman casos de entrega de resultados con retrasos de hasta seis meses o más», declaró. Además, dijo que estas desventajas hacen que el diagnostico disminuya su grado de confiabilidad hasta en un 54%.

El doctor Noel León Rovira, coautor, resaltó que la portabilidad, la confiabilidad de resultados y el reducido tiempo de respuesta son características hasta ahora no vistas en un mismo aparato, el cual se logró concretar a través de fondos estatales y federales, así como de inversionistas privados y recursos del Programa de Estímulos a la Innovación (PEI) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

«Tras varios años de investigación, creamos un prototipo que logramos fuera funcional y viable, que en vez de tomar células, toma datos ópticos y eléctricos de las células del cérvix y endocérvix», agregó.

A decir de los investigadores, una de las motivaciones de este equipo es la posibilidad de ser usado en lugares remotos, ya el seguimiento de los exámenes suele ser un problema en los sistemas de salud apartados de una red médica más completa. «Si ponemos nuestro aparato en una de estas brigadas de salud, obviamente daría la ventaja al médico de diagnosticar a la paciente y darle el seguimiento adecuado. No será necesario esperar esos seis meses que se pierden con el Papanicolau. Su gran potencial está ahí, en los resultados en tiempo real», afirmaron.

La invencion es producto de un proyecto llevado a cabo netamente por mexicanos y sus creadores esperan que empiece a comercializarse en México en 2016 y en Estados Unidos a partir de 2017.

Fuente, ID