Desde la Federación de Estudiantes confirmaron que la acción judicial será interpuesta este lunes y que tienen un video que prueba la agresión que sufrieron mientras participaban de una manifestación el jueves en la mañana. Damián Brito, presidente de la Federación declaró que se les subió a un carro policial y se les propinaron patadas, combos, golpes de mano e insultos, asegurando que la acción es la clara muestra de cómo responde el Gobierno ante las demandas y justas protestas de los estudiantes. “nuestra marcha fue para rechazar la exclusión de la gratuidad”.
Por lo que relatan los alumnos partícipes de la marcha, el personal de carabineros luego de golpearlos dentro del bus de la institución, los trasladó hasta la Tercera Comisaría para soltar a los primeros cuatro a las dos de la tarde, mientras que Brito permaneció hasta las 17:00 horas, esto porque en un principio lo iban a imputar por obra maltrato a carabineros, pero después se comprobó que el uniformado no tenía lesión alguna.
La incertidumbre entre los estudiantes nace después de que saliera a la luz la posibilidad de incluirlos nuevamente en la gratuidad a través de un proceso de acompañamiento o interventor, la misma medida que podría aplicarse a las otras instituciones que, hasta el momento, quedarán fuera del beneficio.
En una entrevista con Radio Francia, Damián Brito declaró que no es nuevo que los golpeen, pero que ahora tienen un video que prueba y registra los hechos, razón por la cual la universidad ha puesto un abogado que junto a María Rivera de Defensoría Popular, interpondrán una querella para no dejar pasar esta grave situación de abuso policial.
Brito dijo que poniendo sus manos en el rostro logró evitar algunos golpes e intentó advertirles que estaban siendo grabados, pero que a los efectivos de Fuerzas Especiales poco les importó, que incluso les decían “no nos importa, a nosotros no nos va a pasar nada”, eso debido a la innata seguridad de salir impunes gracias al amparo del Estado y a la pésima justicia que desarrolla estos casos.
La crítica finalmente va al absurdo manejo que mantiene el gobierno con respecto a la gratuidad en la Educación, porque según los estudiantes que marcharon ese día, la razón de protesta no solamente es la fórmula que están evaluando y que dejará afuera a universidades públicas, sino que todo recae en que la reforma de Bachelet no cambia paradigmáticamente la lógica del sistema educativo y sólo se enfoca en tranquilizar a los empresarios que siguen y seguirán lucrando con las carreras de miles de estudiantes.
La problemática entonces es que no se ha considerado a los actores sociales, siendo ellos el factor más importante en todo este circo romano creado por los parlamentarios y sus luchas de poder.
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