Al menos 50 personas murieron en los últimos dos días a causa de los ataques terroristas perpetrados por parte del grupo extremista Boko Haram al norte de Nigeria.
El último de los atentados tuvo lugar el lunes, cuando dos mujeres kamikazes se hicieron estallar en un mercado en el estado de Adamawa, en el noreste del país. Según informaron fuentes militares a los medios locales, el ataque dejó unas 30 personas muertas.
La intensificación de los ataques se debe al fin del plazo concedido por el presidente, Muhammadu Buhari, para vencer a la organización terrorista antes del 31 de diciembre.
La organización yihadista Boko Haram se fundó aproximadamente en 2002 y juró lealtad al Estado Islámico el pasado mes de marzo. Según el Global Terrorism Index, Boko Haram fue el grupo más letal en 2014, con 6.644 muertos -muchos de ellos mujeres y niños-, por encima de los 6.073 del EI.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) reveló que más de 2.2 millones de personas en Nigeria, donde los yihadistas quieren imponer un estado islámico, han tenido que desplazarse a otras zonas del país para huir de sus ataques. Otras 175.000 personas han buscado refugio en Camerún, Chad y Níger, y otras 200.000 han muerto en manos de los mercenarios.