Los trabajadores del Centro Ulloa denunciaron y exigieron la reincorporación de un grupo de empleados despidos en el organismo encargado de brindar asistencia integral a las víctimas de violaciones a los derechos humanos. Además, resaltaron «la violencia y arbitrariedad» con la que se manejaron las nuevas autoridades. Los despidos en los organismos dependientes del Ministerio de Justicia comenzaron ayer con el pase a retiro de personal afectado al Programa Verdad y Justicia, y al Registro Nacional de Reincidencias.
«Manifestamos nuestro pleno rechazo a la violencia y arbitrariedad de esas medidas, que suponen un flagrante desconocimiento del trabajo y la labor cotidiana realizadas», denunciaron los trabajadores del Ulloa.
El organismo fue creado en 2009 para garantizar la asistencia integral de víctimas de violaciones a los derechos humanos a nivel nacional (Lesa Humanidad, Violencia Institucional y Cromañón). Los servicios ofrecidos por el organismo eran acompañamiento en los juicios por delitos de lesa humanidad o en procesos judiciales por hechos de violencia institucional; derivación y supervisión de las evaluaciones interdisciplinarias en el marco de las Leyes Reparatorias Nacionales; asistencia psicoterapéutica, psiquiátrica y social ; armado y gestión de redes en salud con impronta federal.
El comunicado de los trabajadores sostiene que «los despidos implican la discontinuidad en la tarea realizada y tienen un impacto altamente negativo sobre la población a la que asistimos».
«Repudiamos los despidos, el ataque al empleo público y el vaciamiento del Estado. Defendemos nuestros puestos de trabajo y las políticas públicas de derechos humanos», sentenciaron los integrantes del Centro Ulloa y reclamaron la «reincorporación inmediata» de los despedidos.
Fuente: Página 12