Macri sigue beneficiando a los poderosos: anunció la quita de retenciones a la minería

Tal como se iba anticipando, el gobierno de Mauricio Macri continúa en la dirección de recortar impuestos a los sectores más ricos de la economía, mientras sube tarifas e impuestos a las clases medias y bajas. Tras sacarle los derechos de exportación a trigo, maíz y carnes y reducirlo para la soja, ahora le toca el turno a la minería, un sector que factura casi 40 mil millones de pesos argentinos anuales.

El presidente Macri anunció esta mañana el fin de las retenciones a las exportaciones mineras, en el marco de una visita que realiza a la provincia de San Juan, una de las principales receptoras de esa actividad económica.

«Hoy se terminan las retenciones a las exportaciones mineras», aseguró el presidente en el acto en el que se encontraba acompañado por el gobernador local Sergio Uñac, y Lucía Corpacci, de Catamarca, ambos pertenecientes al Frente para la Victoria (FpV).

De acuerdo a las estimaciones que manejan en el Gobierno, el costo fiscal de reducir a cero el derecho a las exportaciones mineras será de 233 millones de dólares, unos 3.400 millones de pesos al año. Es decir, ingresos que no ingresarán al Estado y, por ejemplo, no financiarán políticas públicas ni subsidios a los sectores más bajos.

La Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM), informó que solo en 2014 el sector produjo por 36.328 millones de pesos, lo que representó un incremento del 39% en relación al año anterior. Unos 3.900 millones de dólares es el valor de lo que se exportó ese año, alrededor de 31,8 mil millones de pesos. Emplea a cerca de 94 mil personas, entre trabajas directos e indirectos, señala el sitio web El Destape.

Cabe recordar que a fines de 2015, el Gobierno nacional hizo efectivo la eliminación de las retenciones y los cupos exportables para trigo, maíz, carne y economías regionales, en tanto que determinó una reducción de 5 puntos porcentuales por año para la soja hasta llevarla a 0 en 7 años.

Sin embargo, las consecuencias de esa medida fueron un alza de los productos de la canasta básica, impulsada a su vez por la devaluación. Así entonces, y tras dos meses de gobierno, todavía no se anunció una medida a favor de las clases medias y trabajadoras, pero sí una batería de medidas que enriquecen a los más ricos.