Con un amplio despliegue policial y severa represión terminó la marcha convocada para hoy miércoles 18 de agosto por la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) en Plaza Italia. Más de seis mil estudiantes secundarios y de educación superior se reunieron en el Parque Bustamante alrededor de las diez de la mañana con la intención de marchar hasta Los Héroes. Sin embargo, y tras conversaciones con la Intendencia Metropolitana desde principio de semana, la marcha no fue autorizada y los grupos de estudiantes fueron rápidamente dispersados por efectivos del Gope.
“Cualquier cosa que suceda ahora será responsabilidad política de la Intendencia” alcanzó a decir Julio Sarmiento segundos antes de que el operativo policial se lanzara con toda su artillería sobre los estudiantes. A bases de gas y chorros del “guanaco” los efectivos lograron replegar rápidamente a los miles de estudiantes que se prestaban a marchar, dividiendo al movimiento en pequeños grupos que se alejaron en todas direcciones.
Carabineros disolvió todos los grupos de estudiantes que quedaran por la zona, utilizando gran cantidad de gas lacrimógeno incluso en los alrededores del Hospital del Trabajador, hasta donde llegaron persiguiendo a estudiantes que huían. Pasado el medio día la situación se encontraba totalmente controlada por la policía en el sector.
Por otra parte, luego de la primera embestida de Carabineros, pequeños grupos de estudiantes, mayoritariamente secundarios, se dirigieron por calles paralelas a la Alameda y por las veredas hacia el sector de Los Héroes, donde originalmente terminaría la manifestación. A medida que los cerca de doscientos jóvenes que lograron llegar se reunían en el bandejón central de la principal avenida de la capital, el número de efectivos de Fuerzas Especiales crecía, así como la concentración de vehículos blindados lanza gases y lanza agua.
Los estudiantes fueron siendo presionados para que despejaran el sector o se desplazaran hacia el poniente, a pesar de que sólo estaban sentados en grupos o incluso jugando a la “ronda” mientras lanzaban consignas en pos de que el Estado se haga cargo de la educación. Finalmente cerca de las 13:30 hrs. fueron dispersados por piquetes de Fuerzas Especiales, que utilizaron profusamente gases lacrimógenos y carros lanza aguas.
El saldo final de la jornada fueron 150 detenidos, entre ellos 100 universitarios y 50 secundarios, y numerosos estudiantes desmayados y con ataques de pánico. Los arrestados fueron trasladados a la Tercera Comisaría de Santiago.
LA REACCIÓN DE LOS ESTUDIANTES LUEGO DE LA REPRESIÓN
Después de la frustrada marcha y mientras Carabineros continuaba dispersando a los estudiantes por la Alameda, varios dirigentes secundarios y universitarios se reunieron para realizar una conferencia de prensa a las 13:30 hrs. en el local de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fech) para dar su análisis de los sucedido. Paul Floor, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Técnica Federico Santa María, Fedusm, señaló que “la violencia policial fue más brutal que nunca, en el año habíamos visto tal nivel de agresividad. El Gobierno ha impedido el derecho de manifestarse; lo único que nos obligan con esto es a radicalizar el movimiento. Llamamos a la comunidad a condenar este tipo de violencia, lo que aquí pasó fue criminal”.
Los dirigentes coincidieron en la necesidad de extender este movimiento al sector de los trabajadores, aunando un movimiento solidario de gran envergadura con el fin de contrapesar el actuar del Estado. La marcha y el movimiento están encaminados a detener la agenda privatizadora del Gobierno en la educación y demandar las reivindicaciones históricas estudiantiles. Además, se subrayó la mala gestión del ministro Joaquín Lavín y su “incapacidad para manejar esta situación”, a la vez que se informaba la nula comunicación y negociación con las federaciones de estudiantes por parte del Ministerio de Educación.
También se señaló la responsabilidad histórica que mantiene el Gobierno con los estudiantes y la educación en general. Victoria Cárdenas, presidenta del centro de alumnos del Liceo Confederación Suiza y vocera del movimiento secundario, afirmó que “no podemos permitir que el Estado reprima a los estudiantes. Los estudiantes tenemos fuerza, tenemos voz, tenemos derecho a reclamar lo que el Estado de Chile nos debe, lo que la historia de Chile nos debe”.
Entre los detenidos se encuentran Julio Sarmiento y Camilo Vallestero, presidente de la de Fech y de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago, Feusach, respectivamente. Sarmiento, en un pequeño comunicado desde la comisaría, comunicó que “el Estado cree que con cárceles y policías nos pueden reducir. No tenemos miedo. Seguiremos avanzando. Seguiremos en contra de la agenda privatizadora del Gobierno”.
Los voceros anunciaron futuras marchas, que continuarán la próxima semana con fecha a confirmar.
Por Sebastián Fierro y Felipe Ramirez
Fotografías: Francisco Hassman y Fernando Hermosilla
El Ciudadano