Tras el anuncio realizado ayer por el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, de inmediato se activaron las alarmas con miras a establecer el control de daños de la medida económica. Valdés sostuvo que el recorte representa una reducción del presupuesto del 1 por ciento respecto a lo aprobado por el Congreso a fines de 2015.
Un recorte en el gasto fiscal que se explica por dos razones, según la autoridad. La primera tiene que ver con el contexto de la debilitada economía mundial, mientras que la otra se fundamenta en el plano interno debido a la caída en el precio del cobre. Esto último ha implicado una disminución de los ingresos fiscales, factor que lleva al Gobierno a anunciar este recorte presupuestario.
“Esta remisión del precio del cobre a largo plazo significa un schok de ingresos estructurales del orden de 1 punto del PIB, lo que requeriría en ausencia de otras cosas, de un ajuste bastante grande; (esto implica) que realicemos un ajuste del techo del gasto por 380 mil millones de pesos ,esto equivale a un 1 por ciento del gasto presupuestario a 540 millones de dólares a un tipo de cambio de 700 pesos, y a aproximadamente a un cuarto del PIB”, explicó ayer el ministro de Hacienda, tras participar en el primer consejo de gabinete del año.
El jefe de las finanzas públicas detalló que el 71,3 por ciento ($270 mil 850 millones) de los US$ 540 millones corresponde a gasto corriente, “como viáticos, gastos en bienes y servicios como estudios, como gastos de representación, materiales de oficina, pasajes, publicidad y difusión”, incluida la renovación de automóviles del sector público durante este año. El ajuste “refuerza la sostenibilidad del gasto fiscal y apoya la economía”, aseguró Valdés.
El ministro añadió que “esta es una propuesta para todos, pero cada ministerio podrá decir ‘saben, yo quiero mantener horas extras porque tengo que pagar esas horas extras, y quiero tener menos gastos de representación’, perfecto, ese es el tema del gasto operacional”, concluyó.
La medida responde a la consulta que el propio ministro de Hacienda hiciera en enero pasado al Comité Consultivo del Precio de Referencia del Cobre, entidad que rebajó el precio estimado a largo plazo del metal rojo de US$2,98 a US$2,57 la libra, valor con el que se elaboró el Presupuesto 2016.
Aunque las áreas que sufrirán recortes ya fueron definidas por Hacienda, el propio Valdés destacó que los respectivos ministerios puedan proponer acomodos. En la oportunidad el jefe de la Hacienda pública dijo que el ministerio de Salud no se verá afectado por el ajuste, lo mismo que el gasto social. Tampoco se afectarán los presupuestos del Poder Judicial y del Congreso Nacional.
Chile Vamos: Ajuste “tardío” y “frenazo de la economía”
“Este ajuste fiscal que se está proponiendo es muy tardío. El Gobierno sabía todo lo que estaba ocurriendo en materia del precio del cobre, y todo lo que ello estaba significando para el país, sin embargo, recién ahora, comienzan a sentir la presión; los hechos concretos (indican) que los gobiernos de izquierda gastan más de lo que reciben”, sostuvo Alejandra Bravo, presidenta del PRI, en una conferencia de prensa conjunta con los demás representantes de Chile Vamos.
En la oportunidad, el presidente de la UDI, senador Hernán Larraín, también se mostró disconforme con la medida anunciada por Hacienda.
“Me parece insuficiente, aquí estamos frente a un frenazo de la economía a causa de las malas políticas de este gobierno, al que se le suma ahora un escenario internacional adverso, creo que el esfuerzo tiene que ser mayor, y segundo, a mí me parece que esta no es una decisión del gobierno, aquí se está cambiando la Ley de Presupuesto, y la Ley de Presupuesto se hace en el Congreso, por lo tanto, nosotros exigimos que este debate se tenga en el Congreso, porque le dedicamos dos meses a definir los gastos que iba a tener el presupuesto”, comentó Larraín.
Mucho más directo fue el presidente de Renovación Nacional, diputado Cristián Monckeberg. “El Gobierno hizo mal las cosas, las sigue haciendo mal, y es bueno porque parece que hoy (ayer) se le olvidó decirlo al ministro Valdés, que esto es consecuencia de haber elegido un gobierno como el de la Nueva Mayoría; esta es la consecuencia de haber elegido un gobierno a cargo de la Presidenta Bachelet, donde hubo una campaña llena de pirotecnia y fuegos artificiales y mucho humo, y donde esos proyectos sociales se llevaron delante de mala manera y hoy día están costándole caro al país”.
El diputado por Las Condes agregó: “Uno está de acuerdo con las transformaciones sociales, pero hay que hacerlo bien, y el Gobierno lo hizo mal, y estos dos años, donde hubo reformas erradas en el manejo de las finanzas públicas, lo estamos pagando caro”.
Por su parte, el senador y miembro de la Comisión de Hacienda del Senado, Juan Antonio Coloma, pidió al Gobierno abocarse más al crecimiento que al ahorro. «La economía chilena está trancada, esa es la verdad. Ahorrar el 1% a mí me parece bien (…) pero si alguien cree que esto va a solucionar el problema está profundamente equivocado, el problema de Chile es de falta de ingresos, falta de crecimiento», dijo el parlamentario de la UDI a emol.
A través del mismo medio el coronel le pidió al ministro de Hacienda «que no siga esta sensación de cambios totales en materia legislativa (reformas) que son lo que producen la falta de crecimiento (…) si hay un trancazo grande y usted dice que lo arreglo con el 1%, no lo va a arreglar, la única fórmula es dar una seguridad que genere inversión y de esa manera el crecimiento vuelva a Chile».
Oficialismo: calma y tiza
El denominador común de las reacciones a ambos lados del espectro político tras el anuncio de recorte fiscal, es la preocupación que genera la disminución del crecimiento, de 4,4 a 4,2 por ciento, según lo proyectado. En este sentido, parlamentarios oficialistas le insistieron a Rodrigo Valdés centrarse en el crecimiento de la economía. En el habitual almuerzo de los días lunes con el secretario de Estado los legisladores de la Nueva Mayoría reconocieron la señal de responsabilidad fiscal tras el anuncio.
«Se lo dijimos todos, que el tema del crecimiento no podemos dejarlo de lado, porque si usted quiere que a nuestro país le vaya mejor y quiero distribuir mejor, tengo que generar una torta más grande. Yo siento que falta verbalizar más el tema de crecimiento y se lo dijimos con esas palabras al ministro», dijo el futuro presidente del Senado, Ricardo Lagos Weber (emol).
En tanto, el senador (PS) Carlos Montes sostuvo en el mismo medio que «la discusión hoy día en el país no es el ajuste, sino cómo seguimos creciendo y ése es nuestro problema. Lo que yo he planteado es que el Ejecutivo tiene que, con la mayor rapidez posible, poner los temas de crecimiento en el centro y qué proyecto. Para eso se requiere de un Estado más proactivo».
En esa línea, aseguró que le insistió al ministro «que tenía que presentar lo antes posible la propuesta de crecimiento para los próximos dos años, qué tipo de alianzas habrá con los privados, qué tipo de acuerdos».
Expertos ponen paños fríos
Según expertos, la medida adoptada por el ministro de Hacienda es una señal de solvencia para las arcas fiscales hacia adelante que es un elemento bastante importante, así lo manifestó a La Tercera el analista Felipe Guzmán.
El experto piensa que al realizar este tipo de ajustes el Gobierno también entrega una señal de solvencia.
«Si bien esto naturalmente va a tener un impacto negativo de corto plazo sobre el crecimiento –explica Guzmán– en una mirada más de mediano plazo tendrá efectos positivos considerando que de esta forma no daña las condiciones a las que podrá acceder el país en términos de endeudamiento en los próximos años».