El telescopio espacial Kepler, de la NASA, ha captado por primera vez una «ruptura de choque». Así llaman los atrónomos técnicamente a lo que conocemos comúnmente como una supernova en pleno estallido.
La NASA informa que el destello brillante de esta supernova en acción fue captado en longitudes de onda óptica (o luz visible) a través del telescopio de alta resolución, por un equipo internacional de astronomos de la Universidad de Notre Dame, en Indiana, EEUU.
El grupo de científicos, dirigidos por el profesor Peter Garnavich, estuvo tres años captando y analizando cada 30 minutos la luz de 5oo galaxias distantes, en la búsqueda de 50 mil millones de estrellas. La misión era encontrar signos de explosiones estelares, más conocidas como supernovas.
Dos gigantes rojas (estrellas masivas) explotaron en 2011 mientras estaban tras el lente de Kepler, lo que llevó a los astrónomos a iniciar esta serie de observaciones para poder ser testigos del momento en que ocurre la explosión. El destello de la onda emitida por el choque no dura más de 20 minutos, por lo que este tipo de misiones es un desafío, informa RT.
«Todos los elementos pesados en el universo provienen de las explosiones de supernovas. Por ejemplo, toda la plata, níquel y cobre en la tierra e incluso en nuestros cuerpos procedían de la explosiva agonía de las estrellas», explica Steve Howell, científico del proyecto Kepler. «La vida existe gracias a las supernovas».
Una réplica animada del estallido fue publicado en este video de la NASA.
El Ciudadano