Un papel levantado con el brazo vendado en el que un niños refugiado que no parece superar los 15 años muestra el lema: «Lo siento por Bruselas».
Así mostraron su solidaridad con los atentados perpetrados en el metro y el aeropuerto de Bruselas.
Lo hacen desde Idomeni, en la frontera de Grecia con Macedonia, donde miles de personas como el joven esperan para entrar a Europa, tras huir precisamente de lo que acaba de golpear a la capital de Bélgica: el terror de los grupos terroristas que acechan a los civiles en el conflicto de Siria.
La imagen, captada por el fotógrafo de Reuters Fedja Grulovic, se ha convertido en todo un fenómeno viral en las redes sociales.