Y un día el gobierno argentino volvió a sus viejos amores. Como las épocas cambian, ya nadie habló de relaciones carnales, sino de tener una “relación madura” con los Estados Unidos.
Mauricio Macri recibió al presidente de ese país, Barack Obama, en la Casa Rosada donde tuvieron una reunión bilateral con sus ministros y luego a solas.
En una conferencia de prensa posterior, Macri resaltó su voluntad de incrementar las relaciones comerciales con Estados Unidos e incluso no descartó un Tratado de Libre Comercio con el Mercosur a futuro.
También le agradeció por “desarchivar” los archivos sobre la dictadura argentina, un tema que hasta ahora no había formado parte de la agenda del líder del PRO. Obama elogió el cambio en la política exterior de la Argentina e hizo su homenaje a las víctimas del atentado a la AMIA, al que comparó con el de Bélgica.
Hoy irá al Parque de la Memoria a rendir tributo a los desaparecidos. Los organismos de derechos humanos anticiparon que no lo acompañarán. Ante una pregunta, Obama eludió hacer una autocrítica sobre el apoyo de su país a las dictaduras del Cono Sur.
El presidente de los Estados Unidos llegó a la madrugada a la Argentina y descansó en el Palacio Bosch, la residencia del embajador de su país. Cuatro minutos antes de las 11, arribó a la Casa Rosada, donde lo recibió un muy sonriente Macri. Ambos departieron en inglés mientras atravesaban la alfombra roja por pasillos y las escaleras.
Tras la foto de rigor, tuvieron un encuentro que duró una hora y media (ver aparte) y una conferencia de prensa. Obama luego cruzó a la Catedral a rendirle homenaje a José de San Martín y a las víctimas del atentado en la mutual judía. “Ayudaremos a encontrar a los culpables del atentado, así como lo haremos con Bélgica”, indicó. Su jornada siguió sin Macri en un encuentro con empresarios en el Sheraton y luego en un foro abierto en la Usina del Arte A la noche, fue agasajado por Macri en una cena de honor en el Centro Cultural Kirchner (ver páginas 4 y 5). Hoy hará su homenaje en el Parque de la Memoria a las 10.30 y luego partirá hacia Bariloche.
Macri dejó en claro el sentido que busca darle a la visita del presidente de los Estados Unidos: la Argentina volvió al mundo. Tras sostener en la última década que el país estaba aislado, el Presidente reconduce las relaciones hacia un realineamiento con Estados Unidos, algo que va de la mano con el pago a los fondos buitre y el retorno de las relaciones con los organismos multilaterales de crédito. Se aleja así el eje regional que incluía a Ecuador, Bolivia y Venezuela y el acercamiento a las potencias emergentes China y Rusia. La visita de Obama también marca un giro del “No al ALCA” del 2005 en Mar del Plata y a la posibilidad de retomar un tratado de ese tipo. Macri consideró que la visita marca “el comienzo de una etapa de relaciones maduras, inteligentes y constructivas”.
Para Obama, en cambio, la visita le sirvió para balancear su gira por la región, en la que viajó a Cuba. La decisión de desclasificar documentos militares y de inteligencia sobre la dictadura argentina también apunta a distanciarse del respaldo de los Estados Unidos a las dictaduras latinoamericanas en los setenta, aunque una pregunta en la conferencia de prensa de ayer mostró los límites de esa posición.