La Audiencia Nacional de España condenó a los anarquistas chilenos Francisco Solar y Mónica Caballero a 12 años de cárcel por los delitos de lesiones terroristas y daños terroristas, en el marco de la investigación por la colocación de un artefacto explosivo en la Basílica del Pilar de Zaragoza el 2 de octubre de 2013.
De acuerdo a lo expuesto por los acusadores, el hecho habría causado heridas a una feligresa, además de afectar bancos y la zona donde se ubica el coro del recinto.
La Audiencia les impuso además el pago de una indemnización de 22.775 euros a la mujer herida y de 182.601 euros al Cabildo de Zaragoza.
Sin embargo, la justicia española los absolvió a ambos de los delitos de pertenencia a una organización terrorista, al no probarse su vínculo con la organización anarquista insurreccionalista FAI-FRI, la que -según se ha acusado- intentó atentar contra el Monasterio de Montserrat de Barcelona.
Cabe recordar que la justicia de ese país había pedido 44 años de cárcel para cada uno de ellos.