El escándalo global sobre las sociedades registradas en paraísos fiscales que salpicó a líderes y personalidades de todo el mundo, no ceja, y menos aún para el presidente argentino, cuyo nombre apareció en el directorio de una sociedad radicada en las Islas Bahamas. Mauricio Macri, quien enarboló la bandera de la anticorrupción en su campaña presidencial, nunca declaró en la Argentina su participación en la firma Fleg Trading Ltd, propiedad de su padre, Franco Macri.
«Me parece que hay algo positivo en el mundo en que vivimos y es que cada vez se avanza hacia una mayor transparencia, cada vez hay más conocimiento público de informaciones que antes eran de difícil acceso», respondió Mauricio Macri ante la pregunta del canal televisivo La Voz del Interior de la provincia de Córdoba (centro del país) acerca de su participación en una de las tantas empresas vinculadas a la firma panameña especializada en generar sociedades offshore, Mossack Fonseca.
«En el caso particular de lo que a mí me compete es una operación legal hecha por otra persona, constituyendo una sociedad offshore para invertir en Brasil, inversión que finalmente no se hizo y en donde yo estaba puesto como director», continuó explicando Mauricio Macri, aunque, tal como señala el diario Página/12, no explicitó por qué la firma fue radicada en un paraíso fiscal.
El presidente detalló que Fleg Trading Ltd era una empresa de su padre, Franco Macri, creada en 1998 para extender Pago Fácil a Brasil.
«La sociedad dejó de operar en el 2008 porque no hizo la inversión. Está todo perfecto, no hay nada extraño en esa operación. Fue declarada ante la DGI en Argentina, porque mi padre lo hizo con recursos genuinos que tenía en el país», se justificó.
«Es un hecho totalmente claro y transparente», aseguró Macri y especificó que su padre «no hizo ninguna cosa incorrecta».
«La sociedad ni siquiera tuvo cuenta corriente, con lo cual fíjense lo poco que llegó a operar. Así que, ¿qué hay de raro en eso? Hay otros que usan paraísos fiscales para esconder dinero que ganan en forma mal habida. Son dos cosas distintas. Acá el problema no es el instrumento, sino para qué se lo utiliza», indicó el presidente quien en este momento se encuentra cuestionado por todo el arco político de la oposición, incluso aquellas fuerzas que hasta ahora habían actuado como aliadas.
En tanto, Franco Macri buscó desvincular a su hijo del escándalo, al decir que Mauricio Macri «no tuvo participación en el capital» de la empresa.
«En atención al informe divulgado por la organización internacional Consortium of Investigative Journalist (ICIJ), conocido como Panamá Papers deseo aclarar que la sociedad denominada Fleg Trading Ltd., registrada en jurisdicción de Bahamas, era de mi propiedad y que la misma fue debidamente declarada ante las autoridades competentes, en especial, frente a las autoridades fiscales en la República Argentina», sostuvo el empresario en un comunicado.
Franco agregó que su hijo «sólo fue director circunstancial designado en el marco de la confianza que exigía la dinámica de los negocios del grupo familiar en aquella época», que tal designación fue «una mera formalidad» y que tampoco «percibió sumas de dinero por ocupar tal posición».
A su vez, otro de los líderes mundiales involucrados en la investigación periodística, el premier de Islandia, Sigmundur David Gunnlaugsson, dirimió a su cargo luego de las multitudinarias manifestaciones en su contra que se desataron a raíz de que tomara estado público su participación en una sociedad offshore.