Comprar por Internet hoy es una opción para muchos. Hay de todo, no debes moverte de tu casa y puedes vitrinear sin hartarte de caminar. Pero, también se ha comprobado, que los maravillosos productos que vemos en las imágenes no siempre son iguales en la realidad.
Es lo que le pasó a Juliet Jacoby, quien tenía en mente un diseño específico para su vestido de graduación del colegio. Así fue que, buscando por Internet, encontró una pieza tal como el que ella quería. Era largo y con mangas borgadas, totalmente rojo.
Lo único malo era que excedía bastante el presupuesto de Juliet. El vestido costaba unos 100 mil pesos chilenos. Pero su mamá encontró el mismo vestido en otra tienda on line, RoseGal. La foto era igual, pero el precio era increíblemente distinto: éste costaba 35 dólares. Así que sin darle más vueltas, lo compraron.
Pasaron dos semanas hasta que llegara el vestido, una semana antes de la graduación de la joven. Pero cuando llegó, el diseño estaba lejos de lo que mostraba la imagen (y del sueño de Juliet).
https://twitter.com/jjacoby14/status/719521896526557184
Juliet se rió de sí misma en las redes sociales al subir estas imágenes de cómo se veía (y quedaba) realmente el vestido. «Cuando piensas que obtendrás un vestido de graduación, pero…», fue lo que escribió en su Twitter, mostrando a todo el mundo su gran «fail».
Pues, esta es la misma lección que muchas personas han aprendido en Internet: nada es lo que parece. Y si vas a comprar algo, que no sea tu vestido de graduación… o no cuando estás contra el tiempo.
«He aprendido mi lección y probablemente no confiaré en un montón de sitios web de vestidos para graduación», comentó Juliet en una entrevista a Seventeen. Finalmente, decidió hacer lo mejor que podría haber hecho: reírse de la situación.