Apenas 15 años tiene el joven cadete de Bomberos que confesó ser autor de una seguidilla de incendios en Puerto Octay. Una situación similar a la del pirómano de Lonquimay a principios de año, quien también estaba relacionado con la institución voluntaria.
Fue este martes cuando el adolescente, que cursa octavo básico, fue detenido por llevar a cabo los diversos incendios que han afectado en el último tiempo a la provincia de Osorno. Así fue confirmado por la fiscal de Río Negro, Leyla Chahín, quien declaró que: «La línea investigativa guarda relación con una seguidilla de incendios y que coincide cronológicamente con la llegada de un carro de bomberos nuevo a la compañía del sector».
El joven cadete había «atacado» principalmente iglesias de la zona. La fiscal comentó que, luego de la primera pista, surgieron antecedentes que permitieron unir las piezas. Además, «Hay cámaras de seguridad que logran captar al joven en dirección al lugar del último incendio de la parroquia, y después al regreso cuando acude al llamado de bomberos».
Por otra parte, se registró la casa del menor de edad – quien no tiene antecedentes penales -, en donde se encontró alcohol y cerca, elemento que puede haber sido usado como combustible.
«Él señala que no había muchos incendios en la zona y que quería ver fuego, quería ir a incendios… y era un aspirante destacado y esa sería su motivación», fue la conclusión de la Fiscalía.
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