Corea del Norte comentó sobre la reciente derrota electoral del partido que se encuentra al mando de la admistración de Corea del Sur, llamándolo una «sentencia de muerte» política dictada el presidente, Park Geun-Hye.
En la votación de las elecciones parlamentarias de la semana pasada, se apreció cómo el partido conservador Saenuri de Park perdió su mayoría en el congreso por primera vez en 16 años, ya que los votantes registrados manifestaron en las urnas su insatisfacción con los bajos índices de su económica y el aumento del desempleo juvenil.
El resultado le dio a tres partidos de la oposición de centro-izquierda del país, un total combinado de 167 escaños en la legislatura de 300 asientos.
La derrota dejó mal parada a Park, quien deberá luchar para empujar su programa de reformas.
Por su parte, Corea del Norte se ha deleitado con el escenario desfavorable, para el gobierno de Park, que trajo las elecciones, pues hace meses que ya vienen atacando duramente la gestión del mandatario del sur.
«A través de las elecciones, el pueblo de Corea del Sur coloca una sentencia de muerte en las políticas de Park Geun-Hye que impulsaron la confrontación de las fuerzas Norte-Sur que llevaron las relaciones a la catástrofe», dijo un portavoz del Comité para la Reunificación Pacífica de Corea (CPRK).
Este fracaso electoral deja a Park como un «presidente vegetal» y uno de los políticos «muertos vivos», dijo el portavoz en un comunicado difundido por la agencia oficial de noticias.
«Si Park no siente ningún remordimiento o verdadera responsabilidad en la derrota, él debe pedir perdón cien veces a la gente de ambas coreas y debe dimitir de su puesto», informó el comunicado.