Esta es la historia de Marianne Winkler una extrabajadora de correos, actualmente jubilada, que ha sido protagonista de este curioso suceso.
Marianne se encontraba de vacaciones en la isla alemana de Amrum, cuando por casualidad se encontró con un mensaje dentro de una botella.
El mensaje que llegó hasta Marianne tardó nada más y nada menos que 109 años en ser hallado y ha sido certificado como el más antiguo del que se tenga registro. se trata del mensaje más antiguo encontrado, ya que fue lanzado al mar hace más de 109 años.
Según el mensaje, el biólogo marino George Parker Bidder fue quien lanzó la botella el 30 de noviembre de 1906 y el mensaje decía, en alemán, inglés y neerlandés, que se completaran los datos de la fecha y lugar donde fue encontrado y que fuera devuelto al biólogo a través de la a Asociación Biológica Marina de Plymouth, Inglaterra.
Marianne y su marido entregaron el mensaje a la Asociación. Obviamente el investigador murió esperando que el mensaje que había enviado regresara.