A través del estudio realizado por CEPA se pudo saber que ya hay 141.542 trabajadores despedidos. El sector más afectado fue el de la construcción, seguido de la administración pública y la industria. El análisis advierte que este proceso de pérdida de empleo «no se ha estabilizado» y que presente un dinamismo «al que deberá prestarse atención».
«De los 80.446 despidos en el sector privado, 71,88 por ciento corresponde al sector construcción, 23,40 por ciento a industria y 4,72 por ciento al sector servicios», detalla el informe. A su vez, en el sector público las cesantías se repartieron entre dos grandes áreas: el Estado nacional (38,28%) y las provincias (48,56%).
Este informe, señalan desde CEPA, fue realizado en base a la información publicada por «medios periodísticos y de sindicatos y cámaras empresarias». Además, recordaron que “la reciente ola de despidos no cuenta con cifras oficiales ni con relevamientos que resulten completos, consistentes y veraces”.
Por su parte, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, aseguró días atrás que actualmente existe “un crecimiento del empleo”.
Tal como señala Página /12, medio que difundió el estudio, en lo que refiere a la evolución de la actividad económica, los distintos indicadores arrojan invariablemente caídas en la actividad”, resume. Luego enumera una serie de variables nada alentadoras: “Las ventas minoristas evidencian una caída de 5,8 por ciento en marzo. La construcción presenta cuatro meses consecutivos de caída de la actividad desde diciembre de 2015, la producción siderúrgica experimentó un claro declive a partir de noviembre de 2015, acelerándose esta caída a partir de diciembre. El complejo automotriz redujo sus exportaciones”.
¿Se revertirá este panorama próximamente?